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SOCIEDAD

El indignante cobro en el ticket de un bar: “No volveré”

Tras consumir un bocadillo, en el ticket aparece desglosado el precio de mismo y, aparte, el del pan. “Ya se dónde no volver”, sentencia.

El indignante cobro en el ticket de un bar: “No volveré”

El boca a boca era un importante método para conocer cómo de bueno (o malo) podía ser un lugar antes de visitarlo. Lo típico de ir de vacaciones a algún lado y, conociendo a alguien que ha ido allí o es de la zona, preguntarle a qué zonas debemos ir para comer y cuáles debemos evitar. Su conocimiento del lugar podía suponer la diferencia entre pasar un buen día o uno no tan bueno.

Ahora, en la era de la tecnología y las redes sociales, lo que antes era analógico se traslada a este mundo. Porque todos, o casi todos, antes de ir a un lugar comprobamos las reseñas que tiene en internet antes de decidirnos. Y cada vez más se acude a este método para, también, dejar constancia del descontento tras una mala experiencia culinaria en un bar o restaurante. Es el caso que nos ocupa, con un cliente descontento después de que le cobraran un bocadillo y, aparte, el pan.

Todo ocurrió en una cafetería en la calle Fragoso, de Vigo. “¡Buenas! Mirad buen este ticket, bocata de tortilla 4 euros, y pan 1 euro”, empieza exponiendo los hechos. Pero, añade, pagó la cuenta por educación y salió de lugar. “Sé donde no volver...tomar nota, manda huevos”, exclama enfadado.

Debate en internet

El precio total, sumando una caña de cerveza, el bocadillo de tortilla, y el pan para hacerlo, era de 7,40 euros. El descontento, obviamente, viene por el hecho de que le cobren de forma aislada el pan para hacerle el bocadillo que ha consumido. Aunque es común que en algunos establecimientos cobren por pan adicional, pero la sorpresa llega cuando aparece desglosado en el ticket como si de un producto aparte se tratara.

Lo ocurrido pronto provocó todo un revuelo en redes sociales, con argumentos a favor y en contra para explicarlo. Algunos lo consideraron “un atraco a mano armada”, mientras que otros defendían que se trataba de un error sin importancia. En su defensa, otro usuario alegaba que “existe el libre comercio”. Por último, otro se posicionaba a favor del cliente con otro ejemplo: “Como si pido una milanesa, y me cobran la milanesa y además el pan rallado”.