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SOCIEDAD

Detectan un submarino ruso en el Cantábrico: España moviliza dos fragatas de la Armada

El submarino ruso ‘Novorossiyk’ es considerado por la OTAN como un “agujero negro” por su dificultad para ser detectado. Nuestro país fue avisado por Francia.

Bélgorod, el submarino ruso con capacidad nuclear
Russian Navy

Una de las principales cualidades de un submarino es su invisibilidad, es decir solo puede ser detectado si quieren que sea visto. Y esto es exactamente lo que pretendía el Estado ruso, mostrar sus capacidades a las potencias de la OTAN, en respuesta a la tensión diplomática que hay entre ambos hemisferios. El Ministerio de Defensa español fue advertido hace unos días por la Marine Nationale (Armada Francesa), sobre la llegada de un submarino ruso a costas españolas, más concretamente en la zona Cantábrica. El submarino Novorossiyk, iba acompañado del buque auxiliar “Alatau” y del remolcador Evgeniy Churov”, con el objetivo de realizar misiones de exploración. Inmediatamente después de recibir el aviso, la Armada Española movilizó a las fragatas Blas de Lezo y Canarias, con el fin de seguir los pasos de las embarcaciones rusas y monitorizar la situación en todo momento. La operación de seguimiento se produjo entre los días 4 y 11 de septiembre, sin ningún incidente, según detalla la EMAD.

La fragata Blas de Lezo desembarcó de su estacionamiento en el Arsenal de Ferrol, automáticamente después de recibir el aviso por parte de la Armada Francesa, que realizó el seguimiento de los submarinos rusos por todo el litoral gallego. Se vigilaron todos sus movimientos hasta que llegó a costas portuguesas, dónde la situación fue relevada por las embarcaciones portuguesas. Posteriormente, las unidades rusas volvieron en tránsito por el mar de Alborán y el Golfo de Cádiz, cuya situación fue monitorizada por la flota Canarias. Estas operaciones son habituales por parte de las distintas naciones, aunque no dejar de tener cierta tensión. En 2022, ocurrió una situación similar en el Golfo de Vizcaya, en aguas francesas, dónde este mismo submarino ruso fue vigilado por la flota francesa.

“Un agujero negro en el mar”

El submarino ruso Novorossiyk pertenece a la primera unidad de uno de los seis submarinos de la denominada “flota rusa del mar negro”. Estas embarcaciones pertenecen al proyecto 877EKM y la OTAN los ha calificado como “agujeros negros en el mar” dada su dificultad para identificarlos. Este tipo de submarinos tienen la capacidad de detectar un blanco a una distancia 3 o 4 veces mayor que la necesitan los sumergibles analógicos de otros países, según datos de la Marina Rusa. Además, suele contar con una tripulación integrada por 50 militares a bordo y está armado con 6 lanzatorpedos de 533 milímetros.

“Operaciones de vigilancia”

Las Operaciones de Presencia, Vigilancia y Disuasión son una herramienta “eficaz para mantener una vigilancia de los espacios de soberanía, lo que permite detectar anticipadamente amenazas y facilitar una respuesta inmediata y viable ante una potencial crisis”, como recuerda el EMAD. Los Mandos Operativos Terrestre (MOT), Ciberespacial (MOC), Aerospacial (MOA) y Marítimo (MOM), forman la estructura de los Mandos Permanentes. Diariamente hay unas 3000 operaciones de vigilancia de las Fuerzas Armadas de distintas naciones, bajo control del Mando de Operaciones.

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