Cinco cárceles reconvertidas en hoteles: una es española
El Parador de San Marcos, en León, se convirtió en una cárcel en el siglo XVII después de que se inaugurara en el siglo XII para hospedar peregrinos del Camino de Santiago.
Numerosos inmuebles, con el paso del tiempo, aprovecharon su construcción para reconvertirse en edificios con otro tipo de uso. Instalaciones de antiguas fábricas, fueron aprovechadas para someterse a reformas y pasar a ser museos, sedes de empresas punteras en la actualidad o tiendas de moda.
Se puede decir que ha ocurrido lo mismo con los hoteles y los hostales rurales. Algunos de los más concurridos, incluso, llegaron a ser cárceles en el pasado. Uno de los casos más destacados fue el del Parador de San Marcos. Edificio emblemático de la red de Paradores de España por su estilo renacentista, dispone de un conjunto de obras de la colección antigua, como la figura del escultor Juan de Juni y el coro de la tribuna de la iglesia.
Inaugurado en el siglo XII para hospedar a los peregrinos del Camino de Santiago, cinco siglos después sirvió como prisión. Francisco de Quevedo estuvo en aquella cárcel entre los años 1639 y 1643. También cumplió con las funciones de centro penitenciario durante el franquismo. En aquella época, el centro albergó hasta 15.000 personas, entre ellas el abuelo del expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
Sin embargo, no es el único caso llamativo. El hotel Het Arresthuis, ubicado en el municipio de Roermond (Países Bajos), fue una prisión entre los años 1863 y 2007. Parte de las instalaciones, aún conservan algunos de los detalles más significativos de la época. Los huéspedes pueden elegir habitación en función de los diferentes tipos de celda, entre ellas, celdas confort y celdas de lujo.
En Londres, el Courthouse Hotel antiguamente fue un centro penitenciario y también acogió la sede de un tribunal de justicia. Entre las celebridades más destacadas en esta prisión se encuentran Mick Jagger, cuando fue arrestado en 1970 al ser acusado de posesión de cannabis. Un hecho similar al del escritor Oscar Wilde. También encontramos otros casos en Europa como el Hotel Wilmina de Berlín (Alemania), una antigua cárcel de mujeres.
The Liberty Hotel, el caso más llamativo de Estados Unidos
Rico en historia y lleno de arquitectura ornamentada, The Liberty, un lujoso hotel ubicado en el barrio de Beacon Hill, se encuentra en el centro de Boston (Estados Unidos). A mediados del siglo XIX, cuando se levantó el edificio, era utilizado como centro penitenciario. Una prisión que estuvo en funcionamiento hasta el año 1990. Ahora, el hotel dispone de casi 300 habitaciones y dispone de visitas guiadas de 30 minutos para conocer su historia y sus detalles más curiosos.