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Así es la nueva moneda de 2 euros de España

La Fábrica Nacional de Moneda y Timbre ha emitido este ejemplar para conmemorar la presidencia española del Consejo de la UE.

Así es la nueva moneda de 2 euros de España
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El sábado comienza el mes de julio y con él, la presidencia española del Consejo de la Unión Europea, cuya duración está fijada hasta el próximo 31 de diciembre. Durante este semestre, España deberá coordinar las formaciones del Consejo y sus respectivos comités.

Será la quinta vez que nuestro país desempeñe dicho cargo. Dos de los cuatro mandatos anteriores se dieron durante la etapa de Felipe González al frente de la Presidencia del Gobierno (1989 y 1995), la tercera con José María Aznar (2002) y la última en 2010, con José Luis Rodríguez Zapatero en el Ejecutivo. En esta ocasión, la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre (FNMT) comenzó a emitir una nueva moneda que conmemore este cargo, en el que España sucede a Suecia.

La moneda de 2 euros acuñada para esta ocasión, empezó a emitirse el pasado 1 de junio. Se calcula que hasta 1,5 millones de unidades se encuentran en circulación para salir de España y recorrer Europa. En cuanto a sus características, son similares a las de una moneda de 2 euros convencional con la diferencia de que en el reverso aparecen las letras UE y el número 23.

También aparecen las leyendas “España 2023- Presidencia española” y “Consejo de la Unión Europea”, además de las doce estrellas que componen la bandera de Europa. Debajo de las letras UE y el 23, aparece la letra M coronada, que representa a la Fábrica de Moneda y Timbre. El anverso es el mismo que el de una moneda de 2 euros.

La situación política no afecta a la presidencia española

Con España inmersa en precampaña electoral, debido a la convocatoria anticipada de elecciones generales previstas ahora para el 23 de julio, una de las dudas que surgen en torno a esta cuestión, es si afecta de lleno a España asumir dicha responsabilidad. La respuesta es no. Es una presidencia de país y no depende del color del Gobierno.

El papel no es dirigir, sino actuar como intermediario imparcial, con el objetivo de garantizar el orden de los procesos legislativos y la cooperación entre los Estados miembros, así como la continuidad del programa de la UE e impulsar los trabajos del Consejo referentes a la legislación del club comunitario.