Rusia se cobra una ‘víctima’ tras el avance de Ucrania

Rusia ha comenzado una nueva reorganización de los altos mandos responsables de la invasión en Ucrania. Como consecuencia del avance ucraniano en la región de Jarkov, el repliegue de las tropas rusas en el este del país vecino como consecuencia del desgaste y del rearme de las Fuerzas Armadas de Ucrania, el Kremlin ha cesado a Dmitri Bulgákov.

Hasta ahora, Bulgákov se había encargado de la logística del Ejército ruso y en los últimos 25 años, ha sido el máximo responsable del suministro de las tropas rusas. Por el momento, Moscú no ha aportado detalles sobre cuál será su futuro más inmediato, o si seguirá con otro rol diferente al desempeñado hasta la fecha. Designado para su cargo en 1997 cuando Boris Yeltsin aún era presidente ruso, los expertos consideran que es el responsable del fracaso en Ucrania.

Su sustituto será Mijaíl Mizintsev, que será el encargado del “responsable del aprovisionamiento material y técnico de las fuerzas armadas”, tal y como confirmó el Ministerio de Defensa ruso. Hasta ahora, ejercía como jefe del Control de Defensa Nacional, y en esta operación militar fue uno de los máximos responsables del ataque y la posterior conquista de Mariupol en el mes de mayo.

Así defendió la clase política rusa su nombramiento. “Mijaíl es un hombre de verdad que por fin pondrá orden en nuestra retaguardia. He esperado esto muchísimo tiempo y estoy increíblemente feliz. No quiero hablar del predecesor, no podría decir nada bueno, no quiero decir nada malo”, dijo el general de la Duma Estatal, Andréi Guruliov.

Sin embargo, no es el primer cambio que Rusia realiza en referencia a los cargos principales de esta operación llevada a cabo en Ucrania. En el mes de abril, Alexánder Dvórnikov pasó a ser el nuevo responsable de los frentes de guerra abiertos en Ucrania tras el intento fallido del ejército ruso por conquistar Kiev. Con este cambio, Rusia busca un revulsivo que permita a sus tropas contener el avance ucraniano y asegurar el control del Donbás.

El último discurso de Putin

Según Putin, la escalada bélica es la única salida posible. Asegura el líder ruso que Occidente nunca ha considerado la opción de una salida pacífica del conflicto, aprovechando la guerra para el desarrollo de la industria bélica, teniendo como hilo conductor el envío constante de armas a Ucrania, algo que se ha normalizado como método de ayuda a Ucrania.

“Creo necesario apoyar la propuesta del Ministerio de Defensa de apoyar la movilización de reservistas”, cerca de 300 mil varones rusos serán llamados al frente, siempre y cuando hayan prestado ya servicio en el Ejército y tengan experiencia.