Rusia advierte de un posible ataque nuclear
El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, afirma que las intervenciones de la OTAN para frenar el avance de las tropas puede derivar en esta nueva escalada.
Rusia vuelve a poner sobre el tablero de la guerra la posibilidad de un ataque nuclear en suelo ucraniano. Serguéi Lavrov, ministro de Asuntos Exteriores ruso, ha lanzado un aviso a los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), con Estados Unidos a la cabeza: están jugando con fuego al tratar de contener el avance de las tropas del Kremlin, después de producirse dos explosiones en bases militares rusas.
“Los esfuerzos occidentales por contener a Rusia, y la política hacia una confrontación militar de facto entre EEUU y la OTAN y Rusia supone en su conjunto una grave amenaza que puede llegar a un choque directo de potencias nucleares con consecuencias desastrosas”, dijo Lavrov durante la Conferencia sobre la No Proliferación Nuclear, que se celebra estos días en Moscú. Un mensaje directo a la Alianza Atlántica, que desde el inicio de la guerra ha suministrado diferente ayuda a Ucrania.
El diplomático del Kremlin asegura que una escalada de estos ataques en suelo ruso podría derivar en un enfrentamiento nuclear con fatales consecuencias entre ambos bloques (la OTAN y los aliados de Moscú). Durante su comparecencia, Lavrov asegura que Occidente no toma en serio a Rusia cuando advierten de las catastróficas consecuencias que puede llegar a tener un enfrentamiento entre ambas potencias nucleares. Algo que puede llegar a ocurrir, advierte, si la OTAN sigue complicando el avance de sus tropas.
“En vez de tomarse en serio nuestras advertencias, Occidente las tergiversa maliciosamente y nos acusan de utilizar la retórica de las amenazas”, afirma Lavrov, quien tiene vetada la entrada en suelo europeo debido a las sanciones. En caso de intentarlo, podría llegar a ser detenido. Desde el inicio del conflicto, el ministro de Asuntos Exteriores ruso comparece cada cierto tiempo para lanzar avisos a la OTAN en general, y a Estados Unidos en particular, al que acusa de elevar los riesgos nucleares por la congelación del diálogo. “Está claro debido a la ausencia de un trabajo negociador para mantener la estabilidad estratégica los problemas existentes se irán acumulando. Eso puede entrañar una multiplicación de los riesgos”.