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¿Quién es Marianne Williamson, la escritora de autoayuda que quiere ser presidenta de EE.UU?

Hasta la fecha, es la única persona que se ha lanzado a la carrera por la nominación demócrata, retando al actual presidente Joe Biden

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¿Quién es Marianne Williamson, la escritora de autoayuda que quiere ser presidenta de EE.UU?

Ya se vislumbra el final de la legislatura en Estados Unidos, y, con la amenaza de Trump reapareciendo en el horizonte, son unas cuantas las voces que cuestionan el liderazgo del veterano Joe Biden. No obstante, de momento, al presidente solo le ha salido una competidora en casa. Marianne Williamson, famosa escritora de libros de autoayuda, ha anunciado su candidatura para las primarias del Partido Demócrata. La pregunta que se hacen algunos al otro lado del océano es ¿Quién es esta señora?

Williamson tiene un amplio historial de participación en la esfera pública. Sus muy exitosos y numerosos manuscritos han vendido cientos de miles de copias en su país. Desde hace años, utiliza su posición prominente y su influencia con fines filantrópicos. Ha organizado un puñado de campañas solidarias y, con soltura y desparpajo, no ha tenido reparos en significarse políticamente en temas de actualidad, siendo a veces muy crítica con su propia bancada -es firme defensora de implementar sanidad pública universal-.

Indudablemente a la izquierda de Biden, esta famosa y a veces polémica mujer despierta simpatías y ampollas. Suele gustar, aunque con intensidad variable, a los sectores más progresistas del Partido Demócrata. Pero no termina de convencer ni a los moderados ni a los pesos pesados de la organización, que desconfían de su retórica de perro verde o heroína outsider. Su votante potencial tiene, hasta cierto punto, un perfil parecido al de Bernie Sanders o Elizabeth Warren, los capitanes del flanco izquierdo. Desde luego, comparte rasgos programáticos con ambos.

No es nueva en política, aunque de momento no ha tenido demasiado éxito en su andadura. Intentó hacerse con un escaño por California en la cámara baja, postulándose como candidata independiente, pero acabó en un muy discreto cuarto lugar. La segunda intentona, y también la más ambiciosa, fue la de 2020. Llegaba a su fin el mandato del polarizador Donald Trump y los demócratas buscaban a un candidato que pudiera derrotarlo en las urnas y apagar los fuegos encendidos.

Los dos favoritos eran el moderado Joe Biden -que se llevaría el gato al agua- y el socialista Bernie Sanders, longevo senador de Vermont y viejo rockero de la izquierda estadounidense. Pero hubo otros nombres que tuvieron cierta relevancia en el proceso de primarias. Elizabeth Warren, que convenció a una porción nada desdeñable del electorado progresista. Kamala Harris, que aunque se fue desinflando acabó haciéndose con la vicepresidencia. Pete Buttigieg, que ahora se desempeña como secretario de Transportes. Beto O’Rourke, que luego fue candidato fallido a gobernar Texas. Y, con algo menos de pujanza, Marianne Williamson, que al ver el poco entusiasmo levantado -al parecer, no es lo mismo que lean tus libros a que te quieran de presidenta- se retiró cabizbaja de la carrera.

Ha tenido casi cuatro años para reponer fuerzas. Esta vez con algo más de carrerilla, porque el inquilino del Despacho Oval no gusta a muchos de sus compañeros liberales. Si nadie más da el paso, Williamson podría sacar rédito de este palpable hastío en la izquierda estadounidense y conjurar a todos los que no suspiran por Biden (que son unos cuantos). No obstante, no parece demasiado probable -aunque nunca digas nunca- que esta escritora vaya a ser la primera presidenta de la nación. En cuanto aparezca una alternativa más jugosa, su llama podría volver a apagarse.