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¿Qué pasa si no puedes dormir? Las cosas que no debes hacer si quieres conciliar el sueño
Echar un vistazo al reloj, beber alcohol o salir de la cama son actos que no se deben hacer si se quiere conciliar el sueño por la noche.
Conciliar el sueño de forma adecuada es fundamental para el organismo. Según explica la revista ‘Fundación del Corazón’, dormir bien tiene numerosos beneficios para la salud, entre ellos una mayor protección del corazón, mejora de la memoria o incluso reducir la depresión.
Sin embargo, el insomnio suele asociarse a otros problemas como el estrés, alimentación en exceso por la noche, los acontecimientos de la vida o los hábitos que alteran el sueño, y puede ser un inconveniente a largo plazo si es recurrente. A veces, el calor típico de los meses más calurosos del año puede favorecer un periodo en el que se duerman menos horas. Para solucionar este problema, hay personas que hacen uso de diferentes recursos como el consumo de ansiolíticos y somníferos.
De hecho, también se recurre a otros hábitos de los cuales se cree que son beneficiosos y ayudan a dormir más rápido y mejor, aunque no suele ser así. Actos como salir de la cama para llevar a cabo otras tareas, beber alcohol o incluso echar un vistazo al reloj son sólo algunos aspectos que se deben evitar si se quiere conciliar el sueño por la noche. Del mismo modo, los expertos recomiendan cambiar los hábitos y el estilo de vida durante el día para evitar cualquier tipo de problema a la hora de dormir.
Potenciar la actividad física, evitar o limitar la cafeína, el alcohol y las comidas abundantes por la noche, acostarse y levantarse a la misma hora todos los días, y limitar las siestas pueden ser hábitos útiles para evitar el insomnio, además de promover un sueño profundo. Un baño o ducha con agua tibia, leer, escuchar música suave, meditar y practicar la respiración abdominal también ayudan.
Asimismo, la elección del colchón también es clave. Debe ser un colchón cómodo, ni muy suave ni muy duro que dificulte la conciliación del sueño. La habitación debe ser lo suficientemente fresca - sin pasarse con la temperatura baja - para evitar que el calor impida dormir por la noche. Guardar los dispositivos electrónicos que más usamos durante el día, y con los que llevamos a cabo tareas pendientes, ayuda a tener un buen descanso nocturno.
La importancia de mantener hábitos regulares
Para tener un sueño saludable la norma básica es: mantener hábitos regulares. Acostarse y levantarse a la misma hora. Mantener la habitación limpia, ordenada y a una temperatura adecuada, dejar de utilizar los dispositivos electrónicos con emisión de luz al menos dos horas antes del horario de sueño habitual, entre otras cuestiones.