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ACTUALIDAD

¿Qué es una DANA meteorológica, cómo se produce y qué significan las siglas?

Hablar de DANA en lugar del tradicional término de “gota fría” se está volviendo habitual en España. El acrónimo se encuentra estrechamente vinculado a lluvias torrenciales, fuertes vientos e inundaciones.

¿Qué es una DANA meteorológica, cómo se produce y qué significan las siglas?
Graciela López

Cambios en el tiempo estos días. Según ha informado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), está previsto que en la segunda mitad de la semana la formación de una DANA traiga consigo tormentas y un nuevo repunte en los termómetros. Un término meteorológico que cada vez es más común escucharlo, por lo que es preciso explicar qué es y qué provoca.

Una DANA, también conocida como gota fría, es una Depresión Aislada en Niveles Altos que se produce por el choque de una masa de aire frío en altura con el aire caliente de la superficie. Este fenómeno da lugar a chubascos y tormentas intensas. De esta forma, la entrada de una masa de aire frío en el núcleo de la atmósfera que entra en contacto con aire más cálido cerca del suelo genera inestabilidad, que favorece la formación de nubes que causan tormentas fuertes.

El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, explica que una DANA tiene dos tipos de causas: dinámicas (asociadas al fenómeno) y termodinámicas (por la diferencia de temperaturas). En el hemisferio norte y en latitudes medias, “lo normal es que las borrascas y los anticiclones, circulen de oeste a este” pero en ocasiones se forman ondulaciones y “una de las ondas forma una especie de bolsa de aire frío y queda aislada con un movimiento más errático”.

Explicación

Este movimiento más errático de la masa de aire frío “hace más difícil la previsión” de su trayectoria, según Del Campo. Además, una DANA puede provocar tiempo adverso, pero también altas temperaturas, debido a que, si está ubicada muy al oeste, lo que genera es la entrada de viento del sur causando una subida de los termómetros.

La AEMET recomienda utilizar el acrónimo DANA para hace referencia a este fenómeno, más que el término “gota fría”, que viene asociado a la escuela alemana que lo bautizó como kaltlufropfen, La Fundación para el Español Urgente exhibe que la gota fría se produce por la entrada de “una masa de aire que se desprende de una corriente muy fría” y que al descender sobre aire caliente “produce grandes perturbaciones atmosféricas”.

¿Cómo se produce?

Lo primero que se necesita para la formación de este fenómeno meteorológico es que el aire de la corriente del chorro circule de manera que se vaya formando dorsales. A continuación, se forma un estiramiento de las corrientes de aire hacia el sur provocado por una bajada en la presión atmosférica.

El año pasado, un estudio de la American Meteorological Society, detectó un incremento de este fenómeno desde la década de 1960 a escala global. “A nivel geográfico, en el hemisferio norte, las zonas más favorables para la llegada del DANA son; el sur de Europa, la costa este americana, la región de China-Siberia, el nordeste del Pacífico y el noroeste de América del norte. En el hemisferio sur son más frecuentes en Australia y Nueva Zelanda, extremo meridional de Sudamérica y sur de Asia”, asegura del Campo.

El caso de España

En España, los episodios de lluvias torrenciales son una constante en la historia de nuestro clima, con riadas catastróficas en muchos puntos y épocas. “Las Dana forman parte del clima de nuestro entorno y en numerosas ocasiones han provocado problemas relacionados con las lluvias torrenciales, aunque no siempre que tenemos cerca una DANA se producen precipitaciones intensas, ya que depende de otros factores como su posición, la disponibilidad de aire húmedo en la superficie, etc”, argumenta del Campo.

Sin embargo, en los últimos años hemos asistido a eventos extremos en el Mediterráneo debido al efecto que han provocado grandes DANAs al aproximarse al sur y este de la península. Un caso reciente fue protagonizado por la borrasca Gloria en enero de 2020.