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ACTUALIDAD

¿Por qué se le llamaba “talego” al billete de 1.000 pesetas en España?

Es la forma masculina de ‘talega’, que durante su uso andalusí hacía referencia a la “bolsa que cuelga de cinto”, lo que explicaría su empleo posterior.

Los billetes de mil pesetas eran conocidos con el nombre de 'talego'.

Si bien cada vez hay más personas que solo han usado los euros como método de pago, la peseta sigue presente en la memoria de muchos. Esta moneda española nacida el 19 de octubre de 1868 comenzó a convivir con el euro el 1 de enero de 1999 y circuló por nuestro país hasta el 31 de diciembre de 2001, cuando se impusieron los euros de forma exclusiva.

Debido a su longevidad, las pesetas han adquirido numerosos apodos a lo largo de su historia. Por ejemplo, un billete de 1.000 pesetas era conocido como ‘talego’. Si bien este nombre comenzó a utilizarse entre entornos marginales, pronto se hizo muy popular, especialmente entre los jóvenes.

Etimología de talego

Etimológicamente hablando, ‘talego’ es la forma masculina de ‘talega’, del árabe ‘ta’liqah’. Según recoge el Diccionario Etimológico Castellano en Línea (DECEL), en árabe estándar se refería a la nota a pie de página porque es un comentario que “se le cuelga al texto”, aunque en muchos sitios también se emplea para hablar sobre el “colgante” de monedas que adorna la frente de la novia en los tocados de las bodas.

Por su parte, el uso andalusí de ‘ta’liqah’ como “bolsa que cuelga de cinto” fue el que dio origen al español ‘talega’ y sus derivados (talego). Al ser considerado como un ‘caudal monetario’, se explica que surgiera este término para apodar al billete de 1.000 pesetas.

Otros significados del término

Además de para referirse al billete de 1.000 pesetas, ‘talego’ tiene varias acepciones registradas en la Real Academia Española (RAE). Una de las comunes, que se sigue usando actualmente, es para referirse a cárcel en un vocabulario más coloquial. Esto se debe a que una prisión está considerada como un recinto cerrado y oscuro del que no se puede salir, es decir, como un saco o talego.

También, como es de esperar, la RAE lo define como un “saco largo y estrecho, de lienzo basto o de lona, que sirve para guardar o llevar algo”. Por último, ‘talego’ puede emplearse para hablar sobre una ‘calza’, cuando, según la institución, se quiere hacer referencia a la “prenda de vestir que, según los tiempos, cubría, ciñéndolos, el muslo y la pierna, o bien, en forma holgada, solo el muslo o la mayor parte de él”.