Qué pasa con la herencia universal de 20.000€ de Sumar, tras el acuerdo con el PSOE
La propuesta de Yolanda Díaz que tanta polémica generó en las redes sociales y que no convenció desde el principio al PSOE finalmente se ha quedado fuera del acuerdo.
Sumar y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) alcanzaron esta semana un acuerdo pragmático para la formación de un nuevo gobierno de coalición. Ambas formaciones, según informaron en un comunicado oficial, gobernarán juntas si el candidato a la Presidencia, Pedro Sánchez, consigue sacar adelante su investidura, aún sin fecha.
El pacto, entre otras medias relevantes, incluye la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas sin rebaja salarial, la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), la ampliación de los permisos por nacimiento y el refuerzo del sistema público de salud para reducir listas de espera.
¿Para qué sirve este acuerdo?
Un acuerdo que ambas formaciones, han subrayado, servirá para una legislatura de cuatro años y permitirá a España “seguir creciendo de manera sostenible y con empleo de calidad, desarrollando políticas basadas en la justicia social y climática, y ampliando derechos, conquistas feministas y libertades”.
No obstante, una de las medidas que finalmente se ha quedado fuera del acuerdo ha sido la conocida como “herencia universal”, una de las propuestas de Yolanda Díaz que tanta polémica generó en las redes sociales y que no convenció desde el principio al PSOE.
¿En qué consistía esta iniciativa?
Ahora bien, ¿en qué consistía esa medida? En su día, Sumar expuso que sería un cheque de 20.000 euros para todos los jóvenes cuando cumpliesen la mayoría de edad (18 años) y que serviría para invertir en vivienda, educación o algún proyecto laboral.
“Emprender no puede estar ligado al origen de los padres. Será para estudiar y para lanzar un proyecto de vida. Para Sumar, el talento y la formación son claves”, transmitió de manera contundente la líder de Sumar en una entrevista con ‘El Mundo’.
Objetivo principal
El objetivo de esta iniciativa, sin duda alguna, era acabar con la desigualdades que provocan las “diferencias económicas” entre los jóvenes españoles en función de la riqueza de los progenitores. Aunque el derecho a acceder a esta herencia universal se adquiriría a los 18 años, el pago de los 20.000 euros se haría efectivo al cumplir los 23 años, tras un proceso de asesoramiento.
El plan de Díaz pasaba por financiar el cheque con una tasa impositiva a los ricos sobre el patrimonio y las sucesiones por debajo del 10%, dejando exenta la vivienda habitual y la riqueza de hasta un millón de euros. Finalmente, nada de esto ha sido posible.