Las dos principales promesas de Pedro Sánchez si repite al frente del Gobierno
El líder socialista acuerda subir el Salario Mínimo Interprofesional al 60% del salario medio y fortalecer el fondo de pensiones.
Junto a unos 3.000 militantes y seguidores socialistas en La Rinconada (Sevilla), el presidente en funciones y candidato socialista a la Presidencia, Pedro Sánchez, ha iniciado su campaña para obtener la investidura como presidente del Gobierno, tras la investidura fallida de Feijóo.
Sánchez asume que recibirá el encargo del Rey Felipe VI para ser el candidato a la investidura y ha solicitado el voto para lograr un gobierno progresista durante cuatro años. En su discurso, evitó mencionar palabras tabú para el PSOE, como “amnistía” y “referéndum”, que son exigencias de los partidos independentistas catalanes.
En su primer anuncio de campaña, Sánchez prometió reformar el Estatuto de los Trabajadores para que el salario mínimo interprofesional (SMI) sea cada año el 60% del salario medio en España. También mencionó su compromiso de fortalecer el fondo de pensiones anualmente con 5.000 millones más.
Sánchez criticó la “teatralización” de Feijóo en el Congreso y su intento de “atrincherarse” como líder del PP, destacando su determinación de formar un “gobierno progresista” en contraste con lo que considera una “investidura postiza” de Feijóo. El líder del PSOE expresó su determinación de trabajar por una “investidura real” y prometió cuatro años más de convivencia y concordia en España. También defendió que hay más concordia en España en comparación con períodos anteriores.
Sánchez ha asegurado también que los socialistas sacarán adelante una ley de paridad para que haya un 50% de poder económico y político en “mano de las mujeres de este país”. También ha sostenido que su próximo Gobierno tendrá como eje principal la vivienda por la dificultad, “cuando no la imposibilidad”, de muchísimas generaciones haciéndola así, “la gran causa nacional”.
Todos con Sánchez
En el evento, también estuvieron presentes María Jesús Montero, ministra en funciones y la segunda figura más destacada del PSOE, así como el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, y Javier Fernández, alcalde de este municipio sevillano y presidente de la Diputación de Sevilla, uno de los líderes socialistas con un gran poder tanto orgánico como institucional dentro del PSOE andaluz.
Tras las críticas abiertas de Felipe González y Alfonso Guerra hacia Pedro Sánchez por sus concesiones en las negociaciones con los partidos independentistas para su reelección como presidente del Gobierno, María Jesús Montero defendió la naturaleza centenaria y democrática del PSOE y afirmó que no permitirán ataques al secretario general del partido. Declaró enfáticamente su intención de proteger y respaldar a Pedro Sánchez, incluso en las puertas de los colegios.
En línea con el mensaje de Pedro Sánchez, el líder del PSOE andaluz planteó la pregunta de si España se había fracturado en los últimos cuatro años bajo el Gobierno de coalición de Pedro Sánchez. Respondió que no, argumentando que el país está más unido, en contraposición a la situación durante la crisis del 1-O en Cataluña bajo el gobierno de Mariano Rajoy, que se caracterizó por disturbios y protestas.