El misil hipersónico que ha desarrollado China y que puede derribar un bombardero
El país asiático trabaja en una versión final de un potente misil, capaz de detectar y derribar el bombardero ‘invisible’ de EEUU: el B-21 Raider.
China es, según la web Global Fire Power, la tercera potencia mundial a nivel militar, solo por detrás de Estados Unidos y Rusia. El país asiático lidera algunos de los diferentes apartados analizados, como es la fuerza marítima. Para otro sitio especializado, Warpower China, cuenta con unas cualidades clave como son su capacidad industrial local y el equilibrio entre sus fuerzas, con una mayoría de equipos modernos frente a los de la época de la Guerra Fría.
Entre toda esta potencia militar, el Ejército Popular de Liberación de China cuenta con varios de los misiles hipersónicos más potentes del mundo. Precisamente, una de estas armas permitiría a Pekín derribar al nuevo bombardero de Estados Unidos, el B-21 Raider, que en los primeros días de noviembre dio su primer vuelo experimental.
Aunque la versión para el combate está clasificada, investigadores de la Universidad Politécnica del Noroeste en Xian realizaron una simulación que confirma su potencial destructivo. De acuerdo con el estudio, dirigido por el profesor Chen Sun, la Fuerza Aérea China podría detectar y disparar sus misiles hipersónicos desde un avión furtivo avanzado.
De acuerdo con Chen, los misiles hipersónicos desarrollados por China cuentan con características que les permiten rastrear y derribar aviones furtivos a partir del uso de “motores de impulsos” de combustible sólido. Gracias a ello pueden ajustar la velocidad durante el vuelo. Según Chen, si el bombardero B-21 detecta la amenaza china, otro misil hipersónico lanzado contra drones de EEUU puede atacar al bombardero gracias a su capacidad para cambiar de objetivo.
El bombardero ‘invisible’
Fue hace casi un año cuando el país norteamericano presentó su última adquisición, el B-21 Raider, conocido como ‘invisible’ por su capacidad para ser indetectable para los radares y para “los sistemas de defensa más sofisticados”. Otro de los aspectos que hace único a este bombardero es su velocidad, pues puede volar a 1.000 kilómetros por hora, un poco por debajo de la velocidad del sonido.
Su sistema de sigilo es más avanzado que el de otros cazas norteamericanos, como los F-35 y los F-22. De este modo, es capaz de ‘colarse’ en territorio enemigo y lanzar ataques con bombas y misiles, ya sean nucleares o convencionales. Además, es capaz de volar con drones furtivos y llevar en su interior una gran cantidad de misiles aire-aire, multiplicando de forma notable su capacidad de combate en el cielo.
Pero China no se queda atrás y, según Chen, ha desarrollado aviones con capacidad de apagar el radar e inspeccionar el entorno gracias a tecnologías de vanguardia y un revestimiento que capta señales eléctricas y térmicas de un objeto en la distancia. De este modo, tanto el nuevo avión furtivo como sus drones, podrían volar más rápido que el bombardero de Estados Unidos.