El exconseller Miquel Sàmper abandona Junts por el bloqueo a la ley de amnistía

Apenas dos días después de que Junts tumbase la ley de amnistía, se ha producido la primera salida del partido independentista. Se trata de Miquel Sàmper, exconseller de Interior de la Generalitat entre septiembre de 2020 y mayo de 2021.

Según ha informado La Vanguardia primero, y ha confirmado posteriormente EFE por fuentes de su entorno, las discrepancias con la dirección del partido de Carles Puigdemont han provocado su salida. Una decisión adoptada por “la brecha ideológica y de formas” con la formación postconvergente. Según el medio citado, Sàmper no está de acuerdo con el voto en contra a la ley de amnistía, que ha vuelto a la comisión de Justicia del Congreso al no ser aprobada por mayoría absoluta.

Una decisión que, según recoge elDiario.es, ha generado división en el seno del partido. Con ella, Sámper abandona Junts desde que en 1986 llegara a la extinta Convergencia, liderada por aquel entonces por Jordi Pujol. Licenciado en Derecho y en Ciencias Políticas y Administración por la Universidad de Barcelona, además de la política, ejerció también la abogacía.

El principal salto en el ámbito político lo dio en septiembre de 2020, cuando fue designado por el expresidente de la Generalitat, Quim Torra, para ocupar la consejería de Interior hasta mayo de 2021, cuando fue reemplazado por Joan Ignasi Elena, tras la formación de Gobierno por parte de Pere Aragonès al ser investido presidente catalán.

“Preferimos el riesgo de la inconstitucionalidad que abandonar gente”

En una entrevista a SER Catalunya, la presidenta de la formación, Laura Borràs, explicó que se trata de una decisión “personal” y que “no puede hacer nada más que respetarla”. También se pronunció acerca de la votación en la Cámara Baja el pasado martes 30 de enero.

Borràs insistió en que desde Junts optaron por preferir “el riesgo de inconstitucionalidad” antes que “abandonar a gente” que puedan quedar fuera del amparo de la ley de amnistía. La principal petición trasladada al PSOE por parte de los postconvergentes, fue la de incluir en esta ley todos los delitos de alta traición y de terrorismo. Una línea roja que en Ferraz no estaban dispuestos a asumir.

Sobre el delito de alta traición, el juez Joaquín Aguirre prorrogó por seis meses la instrucción del ‘caso Volhov’, la trama rusa del procés, en la que están implicadas personas del entorno de Carles Puigdemont, como el exresponsable de relaciones internacionales de Convergència, Víctor Terradellas; el jefe de la oficina de Carles Puigdemont, Josep Lluís Alay, y el informático Jaume Cabaní, por presuntos vínculos con altos dirigentes del Kremlin ruso.