EEUU manda “un mensaje privado” a Irán tras el ataque a Yemen
El presidente Biden mencionó haberlo mandado sin proporcionar detalles específicos sobre el contenido del mensaje tras la segunda ofensiva.
Estados Unidos ejecutó un segundo ataque contra los hutíes del Yemen, generando preocupaciones y tensiones en la región. El presidente Biden mencionó haber mandado un “mensaje privado” a Irán en relación con los hutíes del Yemen. “Saben que no deben hacer nada”, indicó el jefe de la Casa Blanca, sin proporcionar más detalles sobre el contenido del mensaje. Preguntado por una eventual guerra con Irán, Biden descartó que el país árabe quiera confrontar con EEUU: “No, Irán no quiere una guerra con nosotros”.
El ataque aéreo, respaldado por aliados occidentales como Reino Unido, Australia y Canadá, se centró en aproximadamente 30 posiciones de los hutíes. Aunque la acción busca combatir los ataques no provocados a buques comerciales en el Mar Rojo, los hutíes minimizaron el impacto de los ataques en su capacidad operativa.
La situación se interpreta de manera diferente en la región, ya que los hutíes expresaron solidaridad con Hamás. Existe preocupación sobre la posibilidad de que estos ataques arrastren a EE. UU. y Reino Unido a otro conflicto en Yemen, ya complicado después de años de intervención saudita.
Los conflictos preocupan a la comunidad internacional
El Mar Rojo, por donde transita aproximadamente el 15% del comercio marítimo global, ha experimentado una disminución en las operaciones de compañías navieras y un aumento significativo en los costos de seguros. La situación se ve agravada por el respaldo de Washington y Londres a Israel tras los recientes ataques de Hamás en Gaza, que han dejado un alto número de víctimas palestinas y aumentado las tensiones en la región.
A medida que la situación evoluciona, existe la preocupación de que estos eventos puedan sumergir a las potencias occidentales en conflictos más extensos en el ya convulsionado escenario de Yemen. La comunidad internacional observa con atención y temor la posibilidad de un escalamiento de la violencia en una región ya marcada por complejas dinámicas geopolíticas.