Alberto Garzón da un paso a un lado

Los últimos movimientos en la arena política comienzan a tener todas las características de un cambio de ciclo. Hace ya más de dos años que Pablo Iglesias, el primer líder indiscutible de Podemos y actor clave en la canalización de las demandas del 15M, dejó el servicio público tras una campaña final como candidato en la Comunidad de Madrid. Ahora es Alberto Garzón, también pieza destacada de aquella hornada, el que da el paso a un lado para, según sus palabras, propiciar la aparición de “caras nuevas” en la primera línea.

Así lo ha comunicado en su cuenta de Twitter, donde ha publicado un comunicado pormenorizando los detalles y los motivos de su decisión. No obstante, a pesar de haber optado por no formar parte de los candidatos al Congreso de los Diputados, también ha asegurado que trabajará estrechamente “para hacer a Yolanda Díaz presidenta”, y que su acción será dentro tanto de su formación como de SUMAR, la fórmula de confluencia que aspira a aglutinar el voto a la izquierda del PSOE.

En 2016, Garzón sucedió a Cayo Lara como coordinador de Izquierda Unida. A pesar de que en un comienzo intentó reforzar la marca de su formación, diferenciándola del tsunami Podemos que parecía no tener techo electoral, finalmente, tras unos malos resultados en los comicios de 2015 -en los que tan solo consiguió dos diputados-, acabó capitulando y firmando con Pablo Iglesias el ya célebre “Pacto del Botellín”, que concretó una candidatura conjunta bajo el nombre de Unidos Podemos. En la repetición electoral de 2016, obtendrían 71 diputados.

Un ministro de izquierdas

Sería después de las segundas elecciones de 2019 cuando llegaría el punto álgido de su andadura política. Un primer intento fallido de negociación entre el PSOE y Unidas Podemos llevó a reeditar la conocida repetición electoral. Sin embargo, las urnas acabaron arrojando un resultado muy similar al anterior, por lo que los distintos componentes del futuro gobierno de coalición tuvieron que hacer un esfuerzo por alinearse, sobre todo en vistas al carácter estático de la aritmética electoral.

De aquel acuerdo para compartir el poder, Garzón emergió como ministro de Consumo, cargo que desempeña desde el año 2020 y que, según indica en su comunicado de retirada, seguirá desempeñando hasta que termine oficialmente la legislatura con la formación de un nuevo ejecutivo. También seguirá detentando el puesto de coordinador de Izquierda Unida, pero, en términos generales, considera que ha llegado el punto y final de su faena en primera línea.

Yolanda Díaz ha sido la primera el reaccionar oficialmente. La que será candidata a la presidencia del gobierno por SUMAR ha citado el tuit original del comunicado añadiendo un afectuoso mensaje que reza: “El compromiso y la valentía para cambiar las cosas nunca dejan la primera línea. Seguiremos trabajando juntos. Gracias, Alberto”. Garzón fue uno de los primeros en significarse a favor de Díaz y su fórmula de unidad, en los albores del pulso con Podemos y su cúpula. Ahora, será un espectador más de lo que deparen el futuro y los votos de la gente.