Nuevos baremos de discapacidad: cuáles son los grados, cómo se calculan y dónde solicitar
La nueva norma se adapta a la Clasificación Internacional del Funcionamiento, la Discapacidad y la Salud que la Organización Mundial de la Salud (OMS), que data de 2001.
El pasado martes 18 de octubre el Consejo de Ministros daba luz verde al nuevo Baremo para la Valoración y Calificación del Grado de Discapacidad. Este establece nuevos parámetros a la hora de valorar y calificar el grado de discapacidad, de acuerdo a la Clasificación Internacional del Funcionamiento, la Discapacidad y la Salud que la Organización Mundial de la Salud (OMS), que data de 2001.
Cinco grados de discapacidad
- Grado 0 (Discapacidad nula 0-4%): se concede cuando el nivel de discapacidad del solicitante resulta “insignificante” sin una dificultad reseñable en el día a día.
- Grado 1 (Discapacidad leve 5-24%): se concede cuando el nivel de discapacidad del solicitante supone una “dificultad leve” en la realización de las actividades del día a día.
- Grado 2 (Discapacidad moderada 25-49%): se concede cuando el nivel de discapacidad del solicitante es “moderado” y en la vida diaria presenta una “dificultad moderada”.
- Grado 3 (Discapacidad grave 50-95%): se concede cuando el nivel de discapacidad del solicitante es “grave”, como lo es su desempeño en la vida diaria.
- Grado 4 (Discapacidad total 96-100%): se concede cuando el nivel de discapacidad del solicitante es “grave o total” y su desempeño en las actividades del día a día estudiadas por las autoridades les resulta “imposible”.
Según la ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, este nuevo baremo cuenta con criterios “más objetivos, más precisos, más completos y, también, más humanos”.
Novedades
El Real Decreto recoge una serie de novedades respecto a la anterior norma, como la posibilidad de realizar este tipo de trámites por la vía de urgencia, en escenarios de causas humanitarias, de necesidad social, salud o esperanza de vida. A esta prioridad también tendrán acceso las personas víctimas de violencia de género, dado que, en ocasiones, los malos tratos pueden causarles discapacidades. Otra de las novedades del nuevo documento es que estará a la vanguardia de los nuevos avances científicos, de tal manera que las posibles causas de discapacidad que se puedan tener a considerar en el futuro, se considerarán.
Belarra ha apuntado que “sus trámites van a ser también más accesibles, ágiles y flexibles, con las nuevas tecnologías como grandes aliadas y con una perspectiva de derechos humanos”. En este sentido, el nuevo texto también recoge la posibilidad de formalizarlo de manera telemática.