Niño Becerra explica qué sucederá cuando las tiendas estén a 27 grados
“Si se quiere ahorrar energía, por ejemplo, creo que sería mucho más útil fomentar de verdad el teletrabajo y el transporte colectivo”, afirma el economista.
El economista español Santiago Niño Becerra, que fue el único que predijo la crisis del año 2008, ha analizado para informativos Telecinco qué pasará cuando se apliquen los planes del Gobierno de ahorro energético enfocados a la rebaja del aire acondicionado.
Sobre si estamos ante una nueva recesión económica, “la recesión ahora no es sólo dos trimestres consecutivos con el PIB negativo, sino también un crecimiento muy bajo para hacer frente al gasto público y la inflación. Desde esta perspectiva, vamos a una recesión económica”, afirma rotundo.
España en Europa
Niño Becerra repasa el papel económico de España en Europa. “España pinta muy poco a nivel económico, si bien representa solo el 10% del PIB de la Unión Europea. España a nivel económico tiene un modelo que es muy dependiente con el turismo, la hostelería, el comercio… Si a eso se le añade una deuda pública inmensa de 1 billón 400 mil millones, España puede hacer muy poco”
Sobre el plan energético del Gobierno
“Me parece que es muy estético. Si se quiere ahorrar energía, por ejemplo, creo que sería mucho más útil fomentar de verdad el teletrabajo y el transporte colectivo, que no reducir la temperatura en comercios y restaurantes que lo que hará será ahuyentar clientes”, vaticina.
El futuro de la economía
Ante la situación internacional de guerra en Ucrania, presión de Rusia, el conflicto con el gas, la tensión ahora China - Taiwán - Estados Unidos, Niño Becerra destaca que “el mejor escenario para la economía sería la estabilidad. Con esta tensión hay fondos de inversión, empresas, brokers de materias primas, que están ganando muchísimo dinero. Para la economía, lo mejor es que haya estabilidad. Esta necesidad va a ayudar a que disminuya la tensión en la zona de Ucrania, en el este de Europa”.
Respecto a la penúltima crisis de esta semana, “en Taiwán, es más un tira y afloja sin llegar a mayores pero sin llegar a un conflicto bélico que no interesa a nadie”, finaliza.