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Macron manda un aviso para el invierno: “El fin de la abundancia”

El presidente francés cambia el tono positivo habitual en sus discursos y asegura que su país se encuentra en un “punto de inflexión” y se enfrenta a “un cambio radical”.

French President Emmanuel Macron delivers a speech during a meeting on education at the amphitheater of the Sorbonne University in Paris, France August 25, 2022. Mohammed Badra/Pool via REUTERS
POOLREUTERS

El presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, aseguró este miércoles en el primer Consejo de Ministros tras las vacaciones de verano que el país se enfrenta al “fin de la abundancia” debido a los problemas económicos, energéticos y sociales. “Creo que asistimos a una gran convulsión, un cambio radical. En el fondo, lo que estamos viviendo es el fin de la abundancia, de la liquidez sin coste”, señaló Macron, cortando con su convencional optimismo y el lema del “cueste lo que cueste” que había utilizado durante la pandemia.

El presidente francés explicó que la guerra de Ucrania ha traído a Europa “el fin de la despreocupación”, que su país se encuentra ahora en un “punto de inflexión” y que el cambio climático —que ha dejado sequías e incendios en muchos puntos de Europa— ha supuesto este verano una “toma de conciencia total, incluso entre los más escépticos”, según el portavoz del Gobierno.

Tras la pandemia y la guerra en Ucrania, con la sombra de la inflación que pesa sobre la economía global y el riesgo de recesión en Europa, las fuertes temperaturas que golpearon Francia este verano y la sequía han despertado la inquietud de numerosos ciudadanos. También en el propio Gobierno. Por ello, Macron ha asegurado que su Ejecutivo no tiene “derecho a esperar, a gobernar sobre la marcha” y que deben proteger el país “con más ambición”.

Críticas desde la oposición por unas palabras “fuera de lugar”

Las declaraciones de Macron son toda una sorpresa en su discurso, caracterizado por cierto optimismo, incluso en las fases más críticas de la pandemia de la COVID-19. De hecho, la oposición ha criticado sus palabras por considerarlas imprudentes y desalentadoras para los parados y las personas más pobres del país. Philippe Martínez, el secretario general del sindicato CGT, dijo este miércoles que los comentarios de Macron estaban “fuera de lugar”, y que muchos ciudadanos franceses jamás han conocido la abundancia. “Cuando hablamos del fin de la abundancia, pienso en los millones de parados, los millones en situación precaria. Para muchos franceses, los tiempos ya son difíciles, ya se han hecho sacrificios”, señaló Martínez.

“¡Increíble! Es como si los franceses no hubieran tenido preocupaciones y se hubieran dado un gusto excesivo. Tenemos 10 millones de pobres en Francia por el descuido del presidente Macron y el comportamiento depredador de los ricos”, lamentó, por otra parte, el líder del Partido Comunista Francés, Fabien Roussel.

Otros creen que las palabras de Macron son pura estrategia. “Es una especie de anticipación política. Si las cosas realmente se ponen difíciles, es necesario que el presidente lo haya llamado antes para no dar la impresión de que los hechos lo tomaron a él y a su gobierno por sorpresa”, explicó Bernard Sananès, de la encuestadora de opinión Elabe, según recoge The Guardian.

El plan energético francés

Para enfrentar el duro invierno que Francia prevé, el Gobierno de Macron presentará el próximo lunes las grandes líneas de su plan de “sobriedad energética” en diversos paquetes de medidas para el ahorro, para garantizar el aprovisionamiento y para estimular la producción de energía. El portavoz del Ejecutivo francés, Olivier Véran, anticipó que en otoño el Ejecutivo de Emmanuel Macron desgranará “paquetes de medidas sobre la planificación energética”. Eso incluye un plan para garantizar el aprovisionamiento el próximo invierno y un proyecto de ley en septiembre “para acelerar la producción de todo tipo de energías”.

Por ejemplo, está previsto que el plan que se adoptará en las próximas semanas incluya un decreto para formalizar la obligación de que todos los escaparates del país apaguen las luces entre la 1 y las 6 de la madrugada, una medida muy similar a la que ya hay en España. Hasta el momento, Francia ha llenado sus reservas de gas en torno al 90% de su capacidad total y espera alcanzar el 100% antes de que comience el invierno.