Los sueldos afectados por la subida de la cuota de solidaridad de las pensiones
El elemento adicional de progresividad, propuesto por el PDeCat, fija una cuota de hasta el 7% para los salarios que excedan un 50% la base máxima prevista en 2045.
La cuota de solidaridad es una de las principales novedades que recoge la reforma de las pensiones lideradas por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Establecida para la parte del salario que actualmente no cotiza por superar el tope máximo de cotización, el Gobierno ha aceptado una modificación a propuesta del PDeCat.
Una modificación que trae consigo una cotización extra de hasta el 7% sobre todo el salario que excede la base máxima prevista por el Gobierno en 2045, en lugar del 6% previsto inicialmente, y que se conoce como elemento adicional de progresividad, cuyo objetivo pasa por mejorar las condiciones de las pensiones no contributivas y de las contributivas más bajas. Actualmente, las bases máximas de cotización son de 4.495,50 euros mensuales.
A partir del año 2025, la cuota de solidaridad se aplicará de la siguiente manera: para el tramo bajo, se establece un 0,92% para aquellos sueldos que excedan la base máxima en 2025 y que vayan de la base máxima a un 10% superior. Para el tramo medio, queda fijado un 1% a los salarios que vayan del 10,1% de la base máxima hasta el 50%, mientras que a los salarios que superen ese 50% se les aplica un 1,17%.
Finalmente, en el año 2045 con toda la cuota de solidaridad ya desplegada, la cuota para los sueldos incluidos en el primer tramo será del 5,5%, mientras que el tipo aplicado será del 6% y del 7% para los salarios del tramo medio y alto, respectivamente. Los trabajadores autónomos están exentos de la cuota de solidaridad, debido a en este 2023 ha arrancado su propio sistema de cotización. El objetivo de estos cambios pasa por garantizar la viabilidad del sistema de pensiones, así como su financiación.
Además de la cuota de solidaridad, los otros pilares en los que el Ministerio de Seguridad Social se apoya para mejorar los ingresos y proteger el funcionamiento del sistema son el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), la subida de las bases máximas y la mejora de las coberturas de lagunas de cotización que afectan a os trabajadores desempleados de larga duración, o retirados del mercado laboral.
Los sueldos superiores a 90.000, los más afectados
Será en 2045 cuando las rentas más altas, es decir, aquellas que sean igual o superiores a 90.000 euros y que queden por encima de ese 50% fijado para las bases máximas de cotización, serán las más afectadas por la modificación introducida en una reforma que cuenta ya con el visto bueno de Bruselas. y que mantiene el régimen dual de cómputo., es decir, los años que tiene en cuenta la Seguridad Social para el cálculo de la pensión inicial.
En este sentido, existen dos escenarios para los trabajadores. Una de ellas, elegir el periodo actual que son los últimos 25 años cotizados previos a la jubilación y la otra opción, que es una novedad, pasa por elegir los 29 años anteriores a jubilarse con la posibilidad de descartar los dos peores. Esta nueva opción estará disponible a partir de 2026.