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Los alimentos que pueden no existir en 2050
Productos como el café, el plátano, el cacao, la miel o el vino son algunos de los que están en riesgo de desaparecer, según explicaron los científicos.
Según las estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la población mundial alcanzará los 10.000 millones de habitantes, por lo que habría que garantizar la alimentación de todos ellos en un planeta en el que, debido al cambio climático, habrá “recursos alimenticios limitados e incluso menguantes”.
En este sentido, la producción de alimentos debería crecer en un 70% para garantizar la demanda de alimentación a nivel global. Los científicos apuntaron que existe una lista larga de alimentos con riesgo de desaparecer en el año 2050 como consecuencia del cambio climático, entre ellos, algunos de primera necesidad. De este modo productos como el café, el plátano, el cacao, la miel o el vino son algunos que tendrían dicha fecha de extinción, según la ciencia.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés), trabaja ya en varias alternativas para evitar el desabastecimiento, y garantizar la alimentación a nivel global. La comida a base de insectos, el cultivo de microalgas o la creación de carne artificial son sólo algunas de las propuestas para impedir la falta de suministro de alimentos. Para gestionar la demanda de alimentos y cambiar las preferencias dietéticas, la organización hizo hincapié en varios puntos clave.
De este modo los precios “adecuados”, el equilibrio de los patrones dietéticos en países de ingresos altos, la gestión de la demanda a través de la concientización y educación de los consumidores, y el comercio internacional se antojan como fundamentales para evitar problemas con la alimentación. En declaraciones recogidas por ‘Antena 3′ el responsable de Cambio Climático de Greenpeace España, Pedro Zorrilla, explicó las consecuencias del actual cambio climático.
“Esto supone que la biodiversidad en la naturaleza no pueda adaptarse, y que los cambios en la humanidad vayan a ser catastróficos”. Como alternativa a la proteína animal, los insectos se encuentran ya inmiscuidos en la cadena alimentaria, en el caso de España aún está en forma de snacks o barritas hechas con harina. Según la FAO, tienen un importante valor nutricional dado su contenido en energía, grasa, proteínas y fibra, y de micronutrientes como zinc, calcio y hierro.
La alternativa de los insectos en la cadena alimentaria
Por otro lado, Naciones Unidas sostiene que la cría de insectos “emite considerablemente menos gases de efecto invernadero” que la mayoría de las demás fuentes de proteína animal, y requiere “sustancialmente menos agua que la cría de ganado”. Dado su transporte y cría fácil, ofrecen oportunidades económicas. También pueden ayudar a mejorar la nutrición y la seguridad alimentaria, crear nuevas oportunidades de medios de vida y apoyar los sistemas agrícolas sostenibles, según FAO.