La gran pirámide de Keops revela uno de sus grandes enigmas
Un grupo de expertos ha descubierto un corredor que podría llevar hasta la única cámara funeraria desconocida de la época.
La única de las siete maravillas del mundo antiguo que sigue en pie continúa albergando misterios en su interior. Se trata de la Gran Pirámide de Keops, de la que todavía se desconocen la momia y el tesoro que en esta se encuentra. Pero, tras años de investigación, han terminado por resolver una de las grandes incógnitas que recogía, con la colaboración de universidades de distintos equipos. Se trata de un corredor que podría llevar hasta la cámara funeraria del faraón.
Así lo han anunciado este jueves desde el Ministerio de Antigüedades egipcio y el equipo de ScanPyramids —un proyecto egipcio-internacional que dirigen el Instituto Francés HIP y la Universidad de El Cairo—. Por su parte, el titular de Antigüedades egipcio, Ahmed Eissa, ha asegurado ante la prensa que los científicos de los dos equipos “han descubierto un corredor cuyo techo tiene diseño de ‘chevron’ con una extensión de 9 metros de profundidad y 2,10 metros de ancho”.
Dado este nuevo descubrimiento, el secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades, Mostafa Waziri, ha expresado que aspiran “a descubrir el tesoro del rey Keops”. Dado que “ya se han hallado los tesoros de todos los reyes, excepto de Keops. Y este es el misterio”, ha añadido. Además, ha opinado que la entrada norte de la pirámide es “para aliviar la presión de otro pasillo que aún no se sabe a dónde lleva”.
El jefe del comité científico responsable de ScanPyramids, Zahi Hawas, ha detallado que se trata de “un gran descubrimiento” porque Keops es la única pirámide que cuenta con tres niveles y que, en su estructura, se esconde algo” o está “protegiendo otra cosa”, ha explicado el experto, unos siete metros por debajo del pasillo. “La hipótesis es que esté escondiendo o protegiendo la cámara funeraria de Keops no descubierta hasta el momento”, ha señalado y lo ha calificado como “el descubrimiento más importante del siglo”.
El corredor podría estar inclinado
Este hallazgo se suma a los que han ido revelando en los últimos años desde el equipo de ScanPyramids, que nació el pasado 2015. Este proyecto, para el que trabajan expertos de Japón, Francia, Canadá y Egipto, reportó ese mismo año haber dado con una serie de anomalías en el mismo lugar en el que a día de hoy saben que hay un corredor.
Según apuntaron, el lugar presentaba una temperatura más alta a la del resto de la pirámide. Más tarde, en 2017, informaron que habían detectado un nuevo hueco de unos 30 metros de largo y de uso desconocido en la pirámide de Keops. Se trata de lo que hoy han podido verificar que es un corredor, aunque todavía no se sabe si está horizontal o inclinado.
Una técnica no invasiva
El descubrimiento se ha llevado a cabo gracias a una técnica que no resulta invasiva. Se trata de un modelo de trabajo cada vez más común en distintas áreas, como la arqueología, que utiliza tecnología que escanean el subsuelo. Para este caso concreto, han contado con un escáner con un georadar, rayos infrarrojos y una radiografía con rayos cósmicos conocidos como “muon”. Este tipo de rayos se activan cuando las partículas subatómicas procedentes del espacio exterior entran en contacto con la atmósfera terrestre.
Y, gracias a estas técnicas, han podido concluir de manera precisa que hay un corredor en la pirámide. Pero no sólo eso. Además, a partir de un agujero en la construcción han podido terminar de verificar esta información: han introducido en él un endoscopio con el que han descubierto el vacío en el pasillo. De esta manera, no han precisado medios destructivos para la antigüedad.