Kim Jong-un se prepara para un ataque nuclear
Corea del Norte ha advertido de que aprecia estos ejercicios simulando un contraataque nuclear como ensayos para una invasión y que, de producirse, tomaría medidas “abrumadoras”.
La península coreana es, en la actualidad, un punto de máxima tensión que cuenta con un elevado potencial de guerra nuclear. Es por ello que su presidente, Kim Jong-un, ha pedido a su país que esté preparado para lanzar un ataque atómico con el objetivo de disuadir una contienda, al mismo tiempo que acusaba a Estados Unidos y Corea del Sur de amenazar a su país, después de ejecutar unas maniobras militares.
Con esta finalidad, Kim ha supervisado exhaustivamente dos días de ejercicios militares “simulando un contraataque nuclear”, incluido el lanzamiento de un misil balístico que transportaba una cabeza nuclear artificial, y ha expresado su “satisfacción” por los simulacros.
Objetivo
Estos se ejecutaron para “permitir que las unidades relevantes se familiaricen con los procedimientos y procesos para llevar a cabo sus misiones de ataque nuclear táctico”. Estos ejercicios fueron la cuarta demostración de fuerza de Pyongyang en una semana y se produjeron cuando Corea del Sur y Estados Unidos realizaron sus propias maniobras militares.
Por si esto fuera poco, Corea del Norte ha advertido de que aprecia todos esos ejercicios como ensayos para una invasión y que, de producirse, tomaría medidas “abrumadoras” en respuesta. A este evento asistieron el ministro de Defensa, Qiang Sun Nam, y funcionarios del Comité Central del Partido.
Aumento de las tensiones
El simulacro, el cual se dividió en un ejercicio de gestión del sistema de mando de ataque nuclear, un entrenamiento práctico para la transición a una postura de contraataque y un ensayo de lanzamiento táctico de misiles balísticos, no fue como se esperaba.
Y es que el Estado Mayor Conjunto de Seúl aseguró que el misil balístico de corto alcance disparado por Puongyang aterrizó en el Mar del Este, también conocido como el Mar de Japón. Esto fue calificado como una “provocación grave” que violó las sanciones de las Naciones Unidas.
Seúl y Washington han intensificado la cooperación en materia de defensa ante las crecientes amenazas militares y nucleares del Norte, que ha realizado una serie de pruebas de armas prohibidas en los últimos meses. Por todo ello, la Unión Europea se ha visto en la obligación de pedir “la completa implementación” de las sanciones contra Corea del Norte por su programa nuclear.