Himno de Suiza: ¿qué dice la letra, cuál es la traducción y qué origen y significado tiene?
El himno nacional de Suiza es uno de los elementos más reconocidos del país helvético. Su origen se remonta al siglo XIX.
Suiza es uno de los países más conocidos de Europa. Localizado en el centro del Viejo Continente, este es uno de los territorios más reconocidos de todo el planeta. Los Alpes son una de las montañas que más personas atraen, debido a su belleza y majestuosidad.
El país helvético se compone de una gran variedad de símbolos, iconos y tradiciones. Una de las más importantes es su himno nacional, que se remonta al siglo XIX. En aquel momento, había otra canción, pero su creciente popularidad provocó que se terminara adoptando de forma oficial como el tema de Suiza.
Una abadía, origen del himno suizo
Para conocer el origen de este tema, el himno nacional del país, hay que remontarse hasta el siglo XIX. 1841, concretamente. Este nacimiento tiene una particularidad muy concreta, y es que una abadía, la de Wettingen, es la protagonista de esta historia. Allí fue donde un monje cisterciense compuso la que a la postre es la canción más famosa de Suiza.
Alberik Zwyssig. Esta es la identidad de la persona que compuso este elemento, tan vital para la sociedad del territorio del centro de Europa. Con la letra de Leonhard Widmer, el concepto comenzó a aparecer en cánticos patrióticos, y en diferentes zonas. No solo en Suiza, sino que en Romandía y en la parte suiza de Italia comenzó a hacerse de lo más popular. Esto se produjo a partir de 1841.
‘Rust du mein Vaterland’, anterior himno nacional
El actualmente conocido como ‘Salmo Suizo’ no fue el primer himno nacional del país. A finales del siglo XIX, la canción del país era la que se conoce como ‘Rust du mein Vaterland’ (‘Cuando llamas a mi país’ en castellano). Con la música de ‘God Save the Queen’, este tema fue compuesto en 1811 por Johann Rudolf Wyss.
‘Rust du mein Vaterland’ solo se escuchaba en eventos de carácter militar y político. El consejo Federal de Suiza no quiso declarar al ‘Salmo Suizo’ en varias oportunidades como himno nacional, y dejó la decisión al pueblo, para conocer la opinión de este sobre un elemento tan importante para la sociedad. Además, hay que tener en cuenta un detalle importante, y es que los ciudadanos se avergonzaban del que, hasta ese momento era su canción.
En el siglo XX, se produjo este sentimiento en la sociedad suiza, ya que la melodía del himno era muy similar al británico, conocido como ‘God save the Queen’ (‘God save the King’ actualmente por la subida de Carlos III al trono). Este fue el usado hasta 1961, cuando se produjo un concurso para componer la nueva canción del país.
1981, fecha de adopción oficial
Desde 1961, el himno actual fue aceptado, aunque solo de forma provisional. Tras el concurso, no se consiguió una canción que superara a este tema, por lo que recibió la condición de himno nacional por un tiempo ilimitado. Para poder apreciar cuándo fue adoptado de forma oficial, hay que esperar hasta el año 1981. En 1979, se lanzó una convocatoria para encontrar un tema que lo superara, pero finalmente no fue así.
Dios y los Alpes, presentes en la letra
Uno de los aspectos más relevantes que se deben abordar acerca del himno de Suiza tiene que ver con el significado del mismo. En este caso, la canción nacional habla, en gran parte de su contenido, de Dios. En muchos de sus versos, hay elogios al Señor.
Por otra parte, este tema hace referencia al clima que hace en el país, una de sus características más conocidas y a los Alpes, una de las montañas más reconocidas del mundo, y que es uno de los mayores símbolos de Suiza, un país de lo más montañoso.
Letra del himno de Suiza
“Trittst im Morgenrot daher,
Seh’ich dich im Strahlenmeer,
Dich, du Hocherhabener, Herrlicher!
Wenn der Alpenfirn sich rötet,
Betet, freie Schweizer, betet!
Eure fromme Seele ahnt
(bis)
Gott im hehren Vaterland,
Gott, den Herrn, im hehren Vaterland.
Kommst im Abendglühn daher,
Find’ich dich im Sternenheer,
Dich, du Menschenfreundlicher, Liebender!
In des Himmels lichten Räumen
Kann ich froh und selig träumen!
Denn die fromme Seele ahnt
Gott im hehren Vaterland,
Gott, den Herrn, im hehren Vaterland.
Ziehst im Nebelflor daher,
Such’ich dich im Wolkenmeer,
Dich, du Unergründlicher, Ewiger!
Aus dem grauen Luftgebilde
Tritt die Sonne klar und milde,
Und die fromme Seele ahnt
Gott im hehren Vaterland,
Gott, den Herrn, im hehren Vaterland.
Fährst im wilden Sturm daher,
Bist du selbst uns Hort und Wehr,
Du, allmächtig Waltender, Rettender!
In Gewitternacht und Grauen
Lasst uns kindlich ihm vertrauen!
Ja, die fromme Seele ahnt,
Gott im hehren Vaterland,
Gott, den Herrn, im hehren Vaterland”.
Letra traducida del himno de Suiza
“Entras en la madrugada,
te veo en el mar brillante,
Tú, tu Altísimo, Magnífico!
Cuando los nevados Alpes se enrojecen,
Orad, Suizos libres, orad!
Vuestra piadosa alma presiente (bis)
Dios en la venerable patria,
Dios, el Señor, en la venerable patria
Vienes en el anochecer,
Te encuentro en el ejército de estrellas,
Tú, tu amigo del hombre, amoroso!
En los espacios claros del cielo
Puedo soñar contento y dichoso!
Pues el alma piadosa presiente
Dios en la venerable patria,
Dios, el Señor, en la venerable patria.
Vas en la niebla,
Te busco en el mar de nubes,
Tú, Tu inescrutable, Eterno!
De la formación de aire gris
Entra el sol claro y suave,
Y el alma piadosa presiente
Dios en la venerable patria,
Dios, el Señor, en la venerable patria.
Navegas en una tormenta salvaje,
Eres nosotros mismos guardia y defensa.
Tú, todopoderoso gobernante, Salvador!
En la tormentosa y gris noche
Vamos a confiar puerilmente en él!
Sí, el alma piadosa presiente
Dios en la venerable patria,
Dios, el Señor, en la venerable patria”.