Greta Thunberg, detenida
La activista ha sido arrestada durante una manifestación en Oslo en protesta contra los parques eólicos instalados en territorio de los indígenas sami.
La activista Greta Thunberg ha sido detenida este miércoles en Oslo (Noruega) durante una manifestación junto a decenas de personas al bloquear una de las puertas del Ministerio de Finanzas del país. Las autoridades han tenido que desalojar a los manifestantes, que protestaban en defensa de los derechos de la comunidad sami, una comunidad indígena en cuyo territorio el Gobierno ha instalado dos parques eólicos.
En los últimos días, los activistas habían bloqueado las entradas a los ministerios de Hacienda y de Petróleo y Energía. Este miércoles las puertas de las sedes de Clima y Medioambiente e Industria también han sido ocupadas de forma pacífica, informa el diario sueco Verdens Gang. En concreto, los manifestantes piden que se aplique una sentencia de octubre de 2021 del Tribunal supremo noruego que dictó que los parques eólicos de la península de Fosen no tenían una licencia válida.
Los dos parques de Storheia y Roan cuentan con un total de 151 generadores de energía eólica construidos en terrenos donde pastorean los rebaños de renos de los sami, una comunidad indígena repartida en el norte Noruega, Suecia, Finlandia y Rusia. “No aceptamos más palabras vacías en el proceso. Tenemos dos exigencias: los aerogeneradores deben sacarse y hay que devolver las tierras de pastoreo”, han señalado en un comunicado.
Thunberg ha sido una de las personas desalojadas de las puertas de la sede del Ministerio de Hacienda, y posteriormente ha acudido hasta el edificio de Clima y Medio Ambiente, de donde ha sido expulsada. “Seguiré participando”, ha dicho. Las protestas, que comenzaron el pasado jueves, han obligado al ministro de Petróleo y Energía, Terje Aasland, a cancelar una visita oficial a Reino Unido, donde estaba previsto participar en un evento con el príncipe Guillermo.
Contradicciones entre la policía y el Gobierno
De hecho, los manifestantes se han negado a reunirse con el ministro de Petróleo y Energía, y han propuesto sentarse a negociar con el primer ministro del país, Jonas Gahr Store, ya que hablar con Aasland es hablar “con una pared”. Ante las detenciones, la policía ha asegurado que ellos no toman esas decisiones, y que solo siguen órdenes de los ministerios.
“Primero recibimos una solicitud de los ministerios de que deben tener acceso al ministerio. Luego nos dirigimos a la entrada que consideramos menos intrusiva para los manifestantes, para abrirla. Luego reciben una orden, y si no cumplen con la orden, la policía se los lleva y los denuncian”, señala el jefe de tareas de la policía, Brian Skotnes, según recoge el diario noruego Aftenposten.
Sin embargo, los ministerios se lavan las manos. Aasland, ministro de Energía, ha explicado que no ha participado en la decisión de desalojar a los manifestantes. Store, el primer ministro noruego, dice lo mismo.