El ‘truco’ para ahorra en la tarifa del gas
Elegir tarifa regulada, donde el Gobierno es quien marca el tope de los precios, o una tarifa de libre mercado, donde el precio lo hacen las empresas, supondrá una diferencia grande.
El kilovatio hora (kWh) es la unidad de medida del consumo energético que viene expresado en las facturas de cada usuario. El gas natural es una energía que se mide en metros cúbicos y se realiza una conversión a kWh para poder facturar su consumo.
Para conocer el precio por kWh de gas natural de las tarifas hay que fijarse en el término de energía o variable, un concepto que nos indica cuánto nos cobrarán por kilovatio hora consumido.
La Tarifa de Último Recurso (TUR) es la oferta regulada de gas, que se puede contratar en el mercado regulado a través de la diferentes comercializadoras que marcan el precio.
Cómo ahorrar en la tarifa del gas
Hay dos opciones de tarifas, la de libre mercado y la tarifa regulada. Ésta es en la que es el Gobierno quien marca el tope de los precios; en la tarifa de libre mercado el precio lo marcan las empresas.
En las facturas se puede ver cuánto consume cada usuario. Si en una vivienda se consume menos de 50.000 kilovatios hora al año, la solución más económica es contratar una tarifa de gas regulada.
En tan solo un año, los consumidores pueden llegar a pagar cinco veces más, pasando de pagar 41 euros a 207 euros el megavatio hora. En un cómputo general, se puede llegar a ahorrar más de 1.000 euros al año si se consumen más de 35.000 kilovatios hora.
Analizando las tarifas de cada usuario, y las oscilaciones de los precios, la tarifa regulada del gas es una de las alternativas para conseguir ahorrar en las viviendas.