NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ACTUALIDAD

El petróleo flotante de Rusia se dispara

El incremento de petróleo en tránsito marítimo, con los riesgos que supone, levanta la sospecha internacional. Ceuta, uno de los escenarios clave.

El precio del barril de petróleo registra pérdida semanal. Te compartimos cuánto cuesta y a cuánto se cotiza el Brent y Texas (WTI) hoy, 10 de diciembre.
Richard CarsonREUTERS

Una de las principales consecuencias de la guerra en Ucrania ha sido la imposición de sanciones a Rusia por parte de Occidente. Sin embargo, y pese a las continuas reafirmaciones sobre la efectividad de estas, no parecen dañar la economía rusa de la forma que se esperaba. En concreto, las que se han aplicado sobre el petróleo han terminado en un escenario peculiar: se ha alejado el riesgo de escasez y su precio es más barato que antes de la invasión.

La verdadera consecuencia de la ruptura en el comercio del crudo ha sido la búsqueda rusa de alternativas para exportarlo. Esto ha acarreado, no solamente la aparición de la misteriosa “flota fantasma”, sino el aumento de las horas que pasa el petróleo en tránsito marítimo, cifra que se ha disparado en un 180% interanual.

Graves perjuicios para el medioambiente

Tal y como calcula la Agencia Internacional de Energía (AIE) en su informe mensual, la cantidad de crudo transportado en grandes petroleros supera los 90 millones de barriles. Hace un año era de 40 millones. Tampoco es casualidad que Putin flete sus barcos con rumbo a Asia, ya que Moscú tiene prohibido atracar en puertos europeos. Mientras que antes el petróleo ruso, extraído en los yacimientos nacionales, era enviado por oleoducto a los puertos de la Rusia occidental y, posteriormente, repartidos en barco; ahora, según detalla el documento de la AIE al respecto, los viajes a sus principales clientes, la India y China tardan más de 30 y 50 días, respectivamente.

Bajo estos datos es comprensible que la sombra del petróleo se extienda también sobre el medio ambiente: a más tiempo de transporte y más cantidad, más emisiones de Co2 a la atmósfera y riesgo de cualquier desastre. En esta línea, el principal riesgo recae sobre las llamadas operaciones shipt-to-ship, que consisten en cambiar el petróleo de embarcación en pleno mar y en el que se vierte crudo al agua casi de manera inevitable.

La ruta de la “flota fantasma” pasa por España

El incremento acusado de tránsito marítimo tiene como consecuencia una reestructuración del trabajo que protagoniza, de manera misteriosa, la “flota fantasma”. “Para mejorar la eficiencia del transporte de larga distancia, la cantidad de operaciones de barco a barco (STS) ha aumentado significativamente, lo que ha disparado la cantidad de días necesarios para el transporte marítimo. En enero se registraron alrededor de 180 operaciones STS o ship-to-ship, aproximadamente el doble del nivel promedio de 2021″, apunta el informe.

Uno de los puntos donde la flota fantasma suele operar se encuentra, precisamente, en España. Al comienzo de la guerra era esporádico, ahora está en la hoja de ruta. Las aguas de Ceuta son un entorno clave para estos barcos y uno de los enclaves donde, con más frecuencia, cambian el petróleo de una embarcación a otra para luego tomar direcciones diferentes y repartirlo por todo el planeta.

Precios del barril de petróleo Brent y Texas hoy, 8 de marzo: ¿Cuánto cuesta y a cuánto se cotiza?
Ampliar
ANGUS MORDANTREUTERS

Primeramente, Rusia introduce el crudo en unos petroleros pequeños, los Aframaxes, capaces de romper el hielo durante la navegación. Lo hace en terminales de exportación que posee en el Mar Báltico, tales como Primorsk o Ust-Luga. Los barcos cruzan el Ártico los meses de invierno hasta arribar en aguas ceutíes.

Embarcaciones especiales para recorrer el mundo

Allí, los Aframaxes, que cargan unos 700.000 barriles, esperan la llegada de grandes petroleros: los Very Large Crude Carrier (VLCC). Entonces hacen el trasvase de crudo de una embarcación a otra, siendo la segunda capaz de cargar hasta dos millones de barriles. Es decir, de transportar lo equivalente a tres Aframaxes. Y desde Ceuta, dando la vuelta a África, navegan hacia Asia.

Vortexa, una consultora encargada de rastrear petroleros, ha documentado seis casos así desde diciembre. Otros dos se encuentran ahora por la zona. Estos VLCC son viejos conocidos del mercado negro, antiguos transportistas del petróleo iraní y venezolano. Con todo, Ceuta no es la única parada en el mundo para la flota fantasma: Rusia y China estarían barajando otros lugares donde atracar los barcos, bajo la atenta mirada de Estados Unidos, muy crítico con las facilidades que ofrece Xi Jinping a Putin en el mercado del petróleo.