El Gobierno de Israel se rompe
El gobierno de coalición se rompe tras un año de su llegada al poder. El país hebreo celebrará su quinto periodo electoral en tres años.
Israel afrontará un nuevo periodo electoral, el quinto en apenas tres años. Todo llega por la decisión conjunta del Primer Ministro israelí, Naftali Bennett, y del Ministro de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, de disolver la Kneset (Parlamento israelí) y adelantar los comicios.
Una decisión que se produce después de un año de la llegada del actual Ejecutivo de coalición al poder en el país hebreo. Una coalición compuesta por ocho partidos políticos, y mediante el cual Bennett sustituyó al conservador Benjamín Netanyahu, que fue Primer Ministro en dos etapas diferentes (de 1996 a 1999 y de 2009 hasta 2021) y actualmente es el líder de la oposición, además de presidente del partido de centroderecha Likud.
Sin embargo, falta el último y necesario paso para que las elecciones sean una realidad, y se ponga fin al 36º Gobierno israelí. De este modo, haría falta que el Parlamento apruebe el decreto de la convocatoria de elecciones generales. Unas elecciones que, en caso de aprobarse el decreto, tendrían lugar en otoño, como muy tarde en el mes de octubre. Sin embargo, la decisión no ha sentado bien en algunos sectores del Gobierno de Bennett.
En declaraciones recogidas por ‘The Times of Israel’ el Ministro de Defensa y líder de la coalición política centrista ‘Azul y Blanco’, Benny Gantz, expresó su malestar por la decisión adoptada. “Es una vergüenza que el país tenga que ir de nuevo a elecciones”. Según el medio citado la Ministra de Interior Ayelet Shaked, del partido Yamina, recibió la noticia sin que el líder del Ejecutivo consultara con el resto de ministros la decisión.
Un votación clave en el Parlamento cambió todo
Tanto Lapid como Bennett comunicaron en una declaración conjunta que “se habían agotado todas las opciones de estabilizar” la coalición después de su formación hace un año. El detonante de esta convocatoria electoral se debe a la derrota del Gobierno en una votación clave que ha dinamitado la coalición.
Según menciona ‘El País’, el Ejecutivo planteó en la Kneset una prórroga de la norma que ampara un sistema de ‘apartheid legal’ en Cisjordania. Esta extendía desde 1967 los derechos civiles israelíes a los más de 400.000 colonos asentados en territorio ocupado. Entre los que votaron en contra de la propuesta de prórroga de la ley, estaban dos diputados de la mayoría.
Una votación que, en caso de no salir adelante, provocará que los israelíes que viven en Cisjordania pierdan derechos básicos como el acceso a la Seguridad Social, y también dejen de beneficiarse de algunas ventajas fiscales que le otorga esta ley. Precisamente, en contra de esta propuesta votó Netanyahu y el partido Likud en el Parlamento.
Netanyahu ya se quedó sin mayoría absoluta en los últimos comicios
En los últimos comicios celebrados en Israel en 2021, Benjamin Netanyahu no pudo ser reelegido como Primer Ministro israelí debido a que el bloque de partidos encabezados por Likud no alcanzó los 61 escaños necesarios para alcanzar la mayoría absoluta, pese a ser el más votado. La mayoría configurada por la formación de Bennett consiguió los escaños suficientes para derrotar a Netanyahu y llegar a la presidencia.