El cambio que notarán en la nómina de febrero miles de españoles por el ajuste del IRPF

La inflación ha hecho que los sueldos den mucho menos de sí. El español medio está teniendo cada vez más dificultades, por ejemplo, para llenar el tanque de gasolina o la cesta de compra. Por eso, el Gobierno ha tomado medidas dirigidas a aumentar el poder adquisitivo de las rentas medias y bajas. Este paquete de incentivo económico está marcado, principalmente, por modificaciones fiscales. La idea es que, mediante reducciones estratégicas del IRPF, los trabajadores más afectados por la crisis de precios puedan disponer de una mayor porción de su sueldo.

Esta rebaja fiscal beneficiará a cientos de miles de españoles. El gobierno de coalición contemplaba desde el principio en su programa la reducción de los impuestos directos para las personas con menos ingresos, como parte de su plan para reducir la brecha de la desigualdad. Esta nueva situación se concretó con la publicación en el BOE de la nueva Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2023. Todo lo establecido en ella comenzó a entrar en vigor el 1 de enero, pero es a partir de este mes que se estandarizarán definitivamente los nuevos tipos y la mayoría de los potenciales beneficiados notarán la diferencia en la nómina.

Un problema que las sucesivas administraciones han intentado mitigar es el de los llamados “errores de salto”. Estos se producen cuando un trabajador, al recibir un aumento de su sueldo bruto, pasa de un tramo del IRPF al siguiente, aumentando así la cantidad de impuestos que debe pagar en una proporción mayor que la diferencia entre su nuevo y su antiguo sueldo. O, por simplificarlo, que lo que en teoría es un aumento de sueldo, en la práctica es una reducción por tener que hacer frente a un tipo más alto.

Más liquidez para el español medio

El reajuste fiscal tendrá incidencia directa y casi inmediata para trabajadores que cobren menos de 21.000 euros. La razón es que se cambiará la forma de calcular los tramos del IRPF, así que muchos españoles verán su nómina aumentar significativamente a partir de este mes. Algo que, seguro, será recibido con alegría por muchos hogares que lo tienen cada vez más difícil para mantenerse a flote en la difícil coyuntura económica actual.

Otro de los cambios más significativos es que se eleva el sueldo mínimo a partir del cual hay que hacer obligatoriamente la declaración de la renta. Hasta ahora, todos los asalariados que percibían menos de 14.000 euros al año estaban exentos de hacer el ejercicio fiscal anualmente. A partir de ahora, este será el caso para los que cobren menos de 15.000 euros anuales.

Pero no solo las rentas bajas se beneficiarán. También las medias mostraran una mejora. Los que cobran entre 22.000 y 35.500 euros anuales percibirán un aumento de liquidez. También estos tramos del IRPF serán reajustados para aumentar el volumen de la cartera de los españoles medios. No obstante, el impuesto total a pagar por este grupo no se modifica, por lo que es probable que se las devoluciones percibidas al hacer la declaración de la renta sean menores a las de otros años.