EEUU acusa a Rusia de usar “campos de filtración”: ¿qué son?

Campos de filtración que son usados por Rusia en territorio ucraniano. Es la última acusación realizada por Estados Unidos en el Consejo General de Naciones Unidas. Un tema que ha sido objeto de debate junto a otros que atañen al conflicto bélico, como la situación actual de la central nuclear de Zaporiyia, controlada por las tropas rusas desde el inicio de la invasión.

Washington ha denunciado también a Moscú en la ONU por crímenes de guerra prohibidos por las normas internacionales. La embajadora estadounidense ante Naciones Unidas, Lynda Thomas-Greenfield, explicó que su país cuenta con las pruebas suficientes de la existencia de estos campos. Según la versión de EEUU, se traslada a “cientos de miles de ucranianos” a estos campos debido a su posición contraria a la estrategia militar rusa en Ucrania, para su posterior deportación al país ruso.

“El destino de unos u otros es decidido según el grado de peligro que supongan para Rusia. Es un eco de un periodo muy oscuro del pasado”, llegó a detallar la embajadora norteamericana, en declaraciones realizadas ante el Consejo de Seguridad que recoge ‘EFE’. Unos campos en los que desde allí, unos van a prisión, otros son deportados y otros “simplemente desaparecen”.

Estados Unidos y Ucrania han apuntado a Rusia como responsable de las prácticas de tortura que se llevarían a cabo en estos campos, cuyo uso tildaron de “repugnante”. Desde Kiev reportaron que Rusia habría deportado a 2,5 millones de personas desde comenzaran a usar estos campos de filtración. Asimismo el embajador adjunto de Estados Unidos ante el organismo, Richard Mills, también cargó contra Rusia, a quien culpó de realizar afirmaciones que, a su juicio, son “falsas” y no se corresponden con la realidad.

“Son intentos cínicos de desviar la atención sobre el papel de Moscú como el único agresor en lo que es una guerra brutal e innecesaria”, dijo sobre la versión rusa que señalaba a Occidente como responsable de prolongar la guerra en Ucrania.

Rusia desmiente la existencia de estos campos

Por su parte, Rusia ha negado la existencia de dichos “campos de filtración”, y calificó como “mentiras” y “campaña de desinformación” dichas acusaciones. De hecho, los representantes del Kremlin en la ONU han mencionado que solamente se tratan de “campos de registro de ucranianos”, pero que en ningún caso se realizan en ellos torturas ni deportaciones al país ruso.

Unas acusaciones que llegan días después del último cruce de declaraciones y tensiones entre Rusia y la Unión Europea en materia de gas. La decisión de Bruselas y los miembros del G-7 de poner precios máximos al gas y el petróleo, provocó que Vladimir Putin amenazase con cortar el suministro si llevan a la práctica esta decisión. “Si se toman decisiones políticas que contradigan los contratos, no los cumpliremos”, ha sentenciado el presidente durante su intervención en el VII Foro Económico Oriental de Vladivostok.