Cuánto cobra un socorrista, de qué depende su salario y cuáles son los requisitos y niveles
Las ofertas de empleo de socorristas aumentan en verano, pero no todos cobran igual: depende del nivel que tengan, pueden recibir un sueldo de hasta casi 1.400 euros mensuales.
Con la llegada del verano y el buen tiempo las ofertas de empleo crecen. No es ningún secreto que durante el período estival incrementa la temporalidad laboral, en especial en la hostelería, pero también en otros trabajos. Por ejemplo, el empleo como socorrista: son los encargados de cuidar las playas, piscinas y bañistas durante el verano.
El trabajo como socorrista puede ser muy atractivo para las personas más jóvenes, pues aprovechan una época en la que están libres de clases y exámenes para trabajar y ganar algo de dinero. A la hora de aplicar a un empleo de socorrista, muchos se preguntan por el sueldo que recibirán. ¿Qué cobra un socorrista?
El sueldo de un socorrista depende de muchos factores: la comunidad autónoma en la que operan, si trabajan en playas o piscinas… En cualquier caso, según indica Business Insider, el convenio colectivo estatal del sector de mantenimiento y conservación de instalaciones acuáticas puede dar una idea general del salario según tres categorías:
¿Cómo conseguir un trabajo de socorrista?
Para trabajar como socorrista es necesario un certificado profesional de socorrismo acuático. Hay numerosas organizaciones con las que hacer el curso, como por ejemplo Cruz Roja, que ofrece títulos homologados para todas las playas de España. También es necesario haber superado la ESO y tener 16 años o más.
En el curso, el temario comprende habilidades de natación, prevención de accidentes en instalaciones acuáticas, rescate de accidentados en instalaciones acuáticas, primeros auxilios y otras prácticas. En total, los cursos cuestan entre 200 y 400 euros para un total de 370 horas lectivas.
Además, hay que superar varias pruebas físicas, como una apnea de 20 metros, alcanzar una marca de 4:15 minutos en 200 metros de natación y completar una fase de salvamento a una víctima.