Un investigador se topa con una extraña sustancia negra en el timón de un barco y resulta ser una nueva forma de vida
Los científicos creen haber encontrado una genoma previamente desconocida en el poste del timón de una embarcación atracada en Cleveland.

El Blue Heron, nombre por el que se conoce al barco del capitán Rual Lee, es uno de los encargados de la monotorización de las floraciones de algas nocivas en el lago Erie, en la linde entre Canadá y Estados Unidos. Durante la revisión del verano pasado, Lee se percató de un problema mecánico en el barco.
Atracó en Cleveland, Ohio, donde examinaron la embarcación en el Astillero Great Lakes, según informa el medio local Cleveland.com. Se trataba de un problema con los cojines del eje de la hélice, era necesario su reemplazamiento para garantizar un mejor giro en el eje del barco y mejorar su propulsión y maniobrabilidad.
Durante la investigación, Lee se percató de que algo no iba bien. Durante el mantenimiento en el astillero se había expuesto el poste del timón, una parte del barco que normalmente queda oculta a la vista, mostrando una sustancia extraña parecida al alquitrán que rezumaba por la zona ahora visible.
Una materia nuca antes vista en el poste del timón de un barco. Con curiosidad, Lee extrajo una muestra y la sumergió en el agua para comprobar si emitía algún tipo de reflejo, pero no dio muestras de ello. Luego, para comprobar si era inflamable, la calentó con un soplete, pero no pasó nada.
Ante esta situación y sin saber exactamente qué habían encontrado en su Blue Heron, Lee llevó la muestra a investigadores de la Universidad de Mnnesota Duluth (UMD). “Oye, trabajamos en un laboratorio de ciencias”, afirma el capitán del barco. “Tenemos gente que hace cosas”, añade él.
La sustancia ShipGoo001
Doug Ricketts, técnico marino del Observatorio de los Grandes Lagos de Minnesota, fue el encargado de recoger una taza de la materia viscosa. Se la entregó a Cody Sheik, profesor asociado de la universidad y experto en ecología microbiana.
En un principio, Sheik pensó que se trataba de grasa vieja acumulada en el poste del timón. No obstante, al enterarse de que este solo estaba lubricado con agua del lago empezó a interesarse por la sustancia. La materia encontrada se parecía a los restos extraídos de yacimientos de petróleo que usaban sus antiguos compañeros de posgrado.
La relación del nuevo descubrimiento con los restos de los yacimientos de petróleo se descartó rápidamente al no encontrar parentesco ninguno. A partir de ahí, Sheik utilizó sustancias químicas para separar y abrir las células de la sustancia y exponer su funcionamiento interno.
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Durante la investigación, Sheik se encontró con 20 secuencias de ADN, o genomas. Según el investigador, la mayoría de ellas coincidían con genomas conocidas de otras partes del mundo. Una de ellas no. Se trata de una secuencia que no coincide con ninguna otra genoma conocida hasta ahora. Una nueva forma de vida nombrada ShipGoo001, un organismo unicelular cuya apariencia aún no es evidente.
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