Hallazgo histórico en Córdoba: tiene más de 2.000 años
Se trata de un enorme hueso de elefante encontrado en la Colina de los Quemados, el cual su origen llena de dudas a los expertos.
Con motivo del acelerador lineal que donó Amancio Ortega al Hospital Provincial de Córdoba, se llevaron a cabo unas obras para crear un búnker (por motivos de seguridad), lo que desencadenó un importante descubrimiento en la zona de la Colina de los Quemados, en Córdoba.
Allí, entre las capas del tiempo que envuelven esta colina, poco antes de ser encerrados por la pandemia del Covid 19, se encontró un extraño hueso de una gran magnitud. Este resultó ser de un elefante de batalla, y presumiblemente, se remonta a hace unos dos mil años.
Este hallazgo ratifica la conexión con la antigüedad que tiene esta misteriosa colina con la ciudad andaluza, pues se considera la “zona cero” de la arqueología cordobesa. Este hueso de elefante añade una capa adicional de misterio a su historia. ¿Cómo llegó aquí un elefante de batalla en tiempos antiguos? ¿Qué eventos históricos y culturales pueden haber dejado esta huella en la tierra?
Pocas certezas y muchas dudas
En una entrevista a EL PAÍS, Rafael Martínez, zoólogo y profesor de Prehistoria de la Universidad de Córdoba, ha asegurado que se trata de un “carpal de la pezuña derecha, hueso también conocido como capitatum, de un paquidermo africano o indio. Es muy complicado determinar la especie, si asiático (Elephas maximus) o africano (Loxodonta africana)”.
“Este discreto hueso puede ser interpretado como prueba de la presencia de estos animales en el entorno de la actual Córdoba entre los siglos IV y II a. C. (…) Podría pertenecer al periodo de las Guerras Púnicas. Podría ser el primer elefante descubierto de las tropas de Aníbal, pero no se puede asegurar”.
Su origen es incierto
Estos restos plantean una intriga histórica en la que los expertos se han enfocado en dos escenarios diferentes. En el primero, habría que remontarse al año 238 a.C., cuando Amílcar Barca desembarcó en Cádiz al mando de un ejército, y durante su marcha, cruzó Sierra Morena hasta llegar a las costas del Mediterráneo, donde establece la fundación de la actual Cartagena. Durante su camino pudo pasar por la antigua Corduba tartésica, pero el desconocimiento les hace no poder asegurar nada.
Y en el segundo, se produciría tres décadas más tarde, cuando se desató la monumental batalla en el contexto de la Segunda Guerra Púnica. El general romano Escipión triunfó en la épica contienda de Ilipa, cerca de Itálica, y logró expulsar a los cartagineses de la Península Ibérica, y Corduba pudo jugar un papel esencial.
Este martes, Adolfo Molina, delegado del Gobierno andaluz en Córdoba, ha comunicado que la Junta de Andalucía ha asumido la responsabilidad de resguardar y poner a disposición de los investigadores el fragmento.