El pronóstico de Niño Becerra sobre el cambio climático: “Desastre inevitable”
Las previsiones vaticinan que cada vez hará más calor y más sequía, con precipitaciones más puntuales pero torrenciales y con fenómenos meteorológicos más extremos.
Un nuevo estudio de la UPC ha analizado durante dos años los datos de las últimas décadas y ha hecho una proyección del clima que habrá en España para el año 2050. Las previsiones auguran que cada vez hará más calor y habrá más sequía, con precipitaciones más puntuales pero torrenciales y con fenómenos meteorológicos más extremos.
La investigación afirma que la media de lluvia anual en el conjunto de España caerá en los próximos años hasta los 417 l/m². “Con este estudio queremos sensibilizar a la población y a las administraciones públicas para actuar de forma inmediata contra los efectos del cambio climático; no queremos alarmar, sino prevenir”, explica Josep Roca, investigador del Centro de Política de Suelo y Valoraciones (CPSV) de la UPC y coautor del estudio.
Así cambiará el tiempo: zonas más desérticas
Desde 1971, los veranos se han alargado 36 días en España, con un aumento de más de 30 noches tropicales en la costa mediterránea y un incremento de las olas de calor. Sólo el Pirineo se salvaría del clima estepario y semidesértico previsto en todo el país, aunque la crisis climática también hará que suban las temperaturas y se reducirán las nevadas y las lluvias.
“El cambio climático lo estamos experimentando en un plazo muy corto de forma acusada, y con este estudio queremos advertir que la situación es muy grave”, explica Josep Roca, investigador del Centro de Política de Suelo y Valoraciones (CPSV) de la UPC y coautor del estudio.
“En España el ascenso se ha disparado hasta 3,27°C más en ese mismo período. Según esto, el estudio prevé que, desde ahora, hasta mediados del siglo, todavía suba 1,5°C más”, destaca Niño Becerra poniendo el acento en la situación que vendrá próximamente.
“Pasaremos de un clima mediterráneo tradicional a un clima estepario o, en algunos casos, desértico. El problema es global; es necesaria una apuesta muy firme a escala mundial para revertir la situación”, subraya el experto.
Las primeras conclusiones son rotundas: habrá una subida de la temperatura mucho más fuerte de lo que se preveía inicialmente que abocará a Cataluña y a Baleares a un clima cada vez más semidesértico, siendo las zonas más afectadas serán Lleida y Mallorca.
El proyecto se ha basado en los datos del clima recogidos por el programa europeo Copernicus desde 1971 y ha realizado una proyección de la evolución de las temperaturas y de las precipitaciones hasta 2050.
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