¿Dónde se encuentra el lugar más caliente de la Tierra y cuántos grados alcanza?

Al contrario de lo que muchos puedan pensar, el lugar más caluroso del mundo no es Sevilla en agosto. En España no somos ni mucho menos ajenos a eso de torrarse al sol y nadar en sudores cuando llega la temporada vacacional. Buena prueba de ello son los guiris-cangrejo que pululan por nuestras costas todos los años, con su impoluto uniforme oficial de chancleta y calcetín.

Pero, aunque parezca increíble, hay sitios del mundo tan, tan cálidos que ni con una sombrilla y una caña fría se podría sobrevivir. No estamos de un calor del nivel “ozú, cuanta caló”. Estamos hablando de un calor del tipo “se me acaba de incendiar la coronilla”. Algo astronómico, sobrehumano y casi inverosímil. Como un horno gigante. Si lanzas una pizza congelada al aire, estará en su punto antes de tocar el suelo (esto no lo dice el estudio, pero me lo imagino yo).

De América a Irán

A caballo (caballo sudado) entre el sureste de Estados Unidos y el noreste de México se encuentra el vasto y hostil desierto de Sonora. Una inmensa esplanada de arena, rocas, alimañas salvajes y rastrojos secos. Podría perfectamente ser el escenario de alguna película de John Ford. Una estampa clásica del lejano oeste que no es extraña a los forajidos, los asaltos y los disparos de revólver. Pero ahora ni los bandoleros se atreven habitarla.

Un nuevo estudio que ha registrado la temperatura máxima de decenas de miles de lugares del planeta ha determinado que Sonora es, sin lugar a dudas, el sitio más cálido de la tierra. Se registró un récord histórico de 80,8 Cº. No obstante, es el primer año que se incluía esta zona entre las analizadas, por lo que no se pueden establecer comparaciones con valores anteriores para determinar si ha habido un ascenso anormal de la temperatura en la región -aunque lo más seguro es que haya sido así-.

Aunque las dunas americanas no están solas en el podio. La temperatura máxima de Sonora es virtualmente pareja a la del desierto de Lut, al sureste de Irán (aunque en este es bastante improbable que haya cabalgado John Wayne). El caso es que estas zonas del mundo son un pedacito del infierno en la superficie de la tierra. Lugares inhabitables que, además, están viendo incrementadas sus condiciones extremas debido al calentamiento global. Hasta al Coyote se le quitarían las ganas de perseguir al Correcaminos bajo los soles fulminantes de estos dos secarrales demoníacos.