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CIENCIA

Alerta por el aumento de la actividad del Sol: se detectan dos llamaradas

En los últimos días se ha detectado una mayor actividad solar, con dos llamaradas nacidas desde la misma región de la estrella. El pico del ciclo solar, cada vez más cerca.

Actualizado a
Llamaradas solares
NASA/SDO

Apenas hace un par de meses, el pasado junio, los expertos del Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA (Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de Estados Unidos) advertían de una aceleración en el ciclo solar por encima de lo previsto. Esto habría sido la causa de la aparición de diversas manchas solares y erupciones en el Sol. Y hace unos días dos grandes llamaradas solares afectaron a las comunicaciones en la Tierra.

Fue la noche del sábado al domingo, cuando la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) detectó una “fuerte” erupción de tipo X, la más fuerte en la escala de medición de energía liberada, según pudo captar la agencia estadounidense gracias a su Observatorio de Dinámica Solar. Entonces, dos potentes eyecciones de masa coronal se fusionaron al desprenderse del sol, originando un fenómeno todavía mayor. De acuerdo con la NOAA, la segunda eyección fue más rápida que la primera, superando a ésta. Como resultado, la suma de ambas podría provocar una tormenta geomagnética que llegaría a la tierra este martes 8 de agosto.

De acuerdo con la agencia del Gobierno de EEUU para el clima, estas llamaradas “probablemente causaron la degradación o la pérdida total de las comunicaciones”, en la región de Norteamérica, la que en ese momento miraba hacia el sol. Y apenas 42 horas después, en la tarde del lunes, la NASA captó una nueva llamarada solar. “La imagen muestra un subconjunto de luz ultravioleta extrema que resalta el material extremadamente caliente de las llamaradas”, detalla el comunicado de la NASA.

La NOAA explica que la fulguración afectó a la tierra en un evento que alcanzó su punto máximo a las 20:46 horas del día 7 de agosto. “Probablemente causó la degradación o la pérdida total de las comunicaciones de radio de alta frecuencia en el lado de la Tierra iluminado por el Sol mientras duró la llamarada”, detalla.

Llamarada en la misma zona

La zona afectada por el apagón de radio fue, además de Norteamérica, el Pacífico: empezó sobre la costa oeste de México y acabó sobre la costa este de Hawái. Según la agencia encargada del clima espacial, el evento fue de tipo R3. Un apagón de nivel intermedio en una escala que vaya de R1 (de menos intensidad) a R5 (de intensidad extrema). Por su parte, el segundo de los fogonazos también fue de tipo X y de una fuerza parecida al anterior: de X1.6 el primero y de X1.5 el segundo. Tal y como explica la agencia espacial, el máximo nivel de fuerza puede llegar al 10.

La región 3386 del Sol, donde se encuentra una de las manchas solares de la estrella terrestre, fue el origen de ambas llamaradas. La relación entre ambas es estrecha, pues a mayor manchas solares mayor es la probabilidad de que “salte algo”, explica a El País la científica principal del Servicio Nacional de Meteorología Espacial, Consuelo Cid.

De acuerdo con el actual ciclo solar, el pico de intensidad debía llegar en el año 2025, pero los últimos fenómenos parecen indicar que podría tener lugar a finales de este mismo año o comienzos de 2024, lo que según los expertos supondría un “evento terminator”. Esto es lo que ocurre cuando el ciclo solar de 11 años termina de forma abrupta, al cambiar la polaridad de la estrella, comenzando con más intensidad y provocando tormentas geomagnéticas que afectan a la Tierra con apagones y auroras boreales en latitudes en las que no debían aparecer.