Carnaval 2023: qué es un cuplé, cuál es su origen y significado y quiénes lo cantan
El género tiene su origen en expresiones musicales populares de los siglos XIX y XX. Es una canción corta con una sucesión de dobles sentidos y anotaciones cómicas.
España es conocida en todo el mundo por su extraordinaria apertura al jolgorio y el carácter desenfadado de su gente. Hasta el más modesto de los pueblos patrios es un estallido de alegría y cantares cuando llega la ocasión de rendir homenaje a su patrona. Es una cosa que se lleva en las venas y se remonta generaciones. Quizás es el sol, el aceite de oliva o las brisas del mediterráneo. Pero hay pocos países con un historial de expresiones festivas tan hondo y rico. Casi se puede rastrear el espíritu del pueblo español atendiendo exclusivamente a las expresiones artísticas de su ciudadanía. Uno de los géneros musicales que encapsulan mejor este alma colectiva es el cuplé.
Un cuplé es una canción corta que utiliza una lírica ágil y rápida para desenvolver una sucesión de dobles sentidos y anotaciones cómicas. En el corazón de su origen está el entretenimiento de las clases populares, y ha tenido presencia en el desarrollo de la identidad cultural de muchas villas españolas. La temática era muy variada. Los cuplés podían ser desde veladas sátiras de entidad política hasta bromas picantes y sugerentes. La vía de escape de un sentir común. Normalmente, eran interpretados por cantantes femeninas en modestos teatros. El cuplé fue, por ejemplo, una de las tantas bandas sonoras de aquel Madrid que con ojos románticos y metafóricos retratara Ramón Gómez de la Serna en sus múltiples crónicas sobre la ciudad.
A finales del siglo XIX y principios de XX, las cupletistas eran auténticas superestrellas que arrastraban batallones enteros de admiradores. Los patios de butacas de aquellas pequeñas salas donde rebotaban los acordes saltarines del cuplé eran hervideros de vítores y excitación. Algunas de estas celebridades de la canción popular eran, por ejemplo, La Chelito o La Fornarina. Artistas que se distinguían por su muy característico tono de voz agudo y punzante. Preparado, en definitiva, para alcanzar hasta el más oculto rincón del lugar. Más que en excelencia formal, las cupletistas a menudo destacaban en capacidad de vocalización. Eran capaces de declamar siendo escuchadas por igual ante grandes multitudes o pequeñas audiencias.
Folclore y sátira
A medida que fue evolucionando hacia formas más modernas, el cuplé se entremezcló con otros géneros característicos de la canción popular española. Dependiendo del territorio, hubo variaciones en su devenir y ocupó lugares más o menos prominentes en los folclores regionales. No obstante, aún hoy en día es una tipología musical que sigue muy viva gracias a su vinculación con los Carnavales, lustrosos y desenfrenados en tantas zonas del país.
Se podría entender, por ejemplo, que la famosísima chirigota gaditana es una de tantas evoluciones formales del cuplé tradicional. Cambiando el solitario vozarrón de soprano por el unánime celebrar del coro, las calles de Cádiz se inundan por Carnaval de ingeniosas y canallas composiciones poéticas acompañadas de rápida música. Todas las temporadas, se hacen virales estas demostraciones de genialidad que nada tienen que envidiar a las que sonaban por las calles, los teatros y las tascas cien o doscientos años atrás. El cuplé es, en definitiva, una semilla que nació del espíritu burlón de una ciudadanía abierta a la humorada pero con sentido crítico. Ahora que el Carnaval llega a tantos sitios, España afila su lápiz y aclara la voz. Llegan las estrofas cortas que cortan.