Bolsonaro recibe el alta tras ser hospitalizado por dolores estomacales
El expresidente de Brasil fue ingresado en un hospital de Florida tras sufrir fuertes dolores estomacales.
Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil, ha sido dado de alta tras ser ingresado este lunes en un hospital en el estado de Florida, al sureste de Estados Unidos, después de sufrir unos fuertes dolores estomacales. De acuerdo con la información del diario brasileño ‘O Globo’, el que fuera mandatario de Brasil ha sido ingresado en el hospital AdventHealth Celebration, situado a las afueras de la ciudad de Orlando.
Ha sido el propio Bolsonaro el que ha confirmado el alta hospitalaria a través de su cuenta de Twitter: “Ayer nuevo dolor y alta hospitalaria en Orlando, Estados Unidos. (Estamos) agradecidos por las oraciones y mensajes de pronta recuperación”, ha escrito el expresidente. “Después de ser apuñalado en Juiz de Fora, me sometí a cinco cirugías. Desde la última, he tenido dos veces más dolencias que me han llevado a otros procedimientos médicos”, ha agregado en el mensaje.
Conviene recordar que, en 2018, Bolsonaro fue víctima de un apuñalamiento en el abdomen durante la campaña electoral. Después de dicho ataque, el por entonces candidato se ha sometido a cuatro cirugías en relación con dicho suceso.
Pero a pesar de estas operaciones, Bolsonaro ha sufrido reiterados episodios de dolor abdominal, que le han llevado a ser ingresado como en esta ocasión. La más reciente tuvo lugar el pasado mes de noviembre, cuando fue ingresado en el Hospital de las Fuerzas Armadas de Brasilia.
Sus palabras tras la toma del Congreso
Esta hospitalización tiene lugar apenas 24 horas después de que cientos de sus seguidores asaltaran la sede de los poderes del Estado en Brasilia, en un episodio que recuerda a lo ocurrido hace dos años en el Capitolio de Estados Unidos.
Tras ello, Bolsonaro se manifestó a través de sus redes sociales. “Las manifestaciones pacíficas, en forma de ley, son parte de la democracia. Sin embargo, las depredaciones e invasiones de edificios públicos como las ocurridas hoy, así como las practicadas por la izquierda en 2013 y 2017, escapan a la regla”, escribió.