Alta tensión entre Eslovaquia y Rusia
Desde Bratislava han señalado a ingenieros rusos de acometer un sabotaje de los cazas que el país envió a Ucrania. “No está claro que pudiesen entrar en combate”, dijo el Gobierno.
Ingenieros rusos habrían saboteado los cazas que Eslovaquia ha destinado a las Fuerzas Armadas de Ucrania. Es la afirmación que ha realizado el ministro de Defensa eslovaco, Jaroslav Nad, después de comprobar que los aviones de combate no se encontraran en condiciones de ser utilizados por los ucranianos.
El ministro señaló de esta manera a un grupo de ingenieros que trabajaron en la base aérea de Sliač, ubicada en el centro del país, a finales de 2022. “Los defectos de los aviones aparecen sólo en aquellas partes a las que accedían los rusos”, aseguró. Una afirmación que ha realizado una semana después de que el Gobierno presidido por Eduard Heger aprobase el envío de estos cazas para que Ucrania pueda continuar con el combate contra las tropas rusas.
Con este suministro de armamento, Eslovaquia se convirtió en el primer país junto a Polonia en enviar este tipo de aviones. En su caso, enviaron los Mikoyan MiG-29, un ejemplar de caza soviético creado en 1977 y que entró en servicio en la Fuerza Aérea Soviética en 1983. Bratislava envió 13 unidades de estos cazas, por 28 de las realizadas por Polonia.
Sobre sus características, estos cazas cuentan con una longitud de 17,32 metros y una envergadura de 11,36 metros. Con un peso de 18 toneladas, dispone de dos motores que le impulsan hasta los 2.600 kilómetros por hora, y lograr una altitud máxima de 18.000 metros. Su cañón de 30 milímetros le permite albergar diferentes tipos de misiles aire-aire y cohetes aire-tierra.
Envío del S-300 en el inicio del conflicto bélico
De hecho, no es la primera vez que Eslovaquia proporciona ayuda militar a Ucrania desde el inicio de la invasión. El año pasado, anunciaron el envío de sistema de misiles antiaéreos de largo alcance, del tipo S-300 y de producción rusa. Un armamento de fabricación soviética que, además de Eslovaquia, de todos los países que conforman la OTAN tan solo cuentan con él Bulgaria y Grecia. Su primera versión fue producida en 1978, con la ya extinta Unión Soviética.
El sistema se compone de los siguientes elementos: radares de vigilancia y de seguimiento, un puesto de mando y el lanzador de misiles (hasta cuatro a la vez). En el caso concreto de Eslovaquia, su radar de vigilancia alcanza los 300 kilómetros de cobertura, mientras que el de seguimiento llega a los 200. Por último, los misiles equipados, conocidos como 5V55R, con un alcance de 75 km y una velocidad máxima de 1.900 metros por segundo.
Ataques ucranianos “raros”
La inteligencia británica, por su parte, hizo especial hincapié en los modales de las tropas rusas en sus últimas ofensivas en Ucrania. Desde Londres explicaron que las técnicas militares del Kremlin resultaron “no ser tan efectivas como se creían sus líderes”. Aparte de eso, recalcaron el logro ucraniano para mantener en buenas condiciones la inmensa mayoría de su sistema energético. “Ucrania ha podido desplegar una red de reparación de puntos dañados del sistema energético”, dijo la inteligencia británica.