Advierten de la estafa del ‘alquiler fantasma’: ¿qué es?

La elevada inflación, sumada a las dificultades económicas que muchas personas jóvenes sufren y a la escasez de pisos disponibles para alquilar, complica el acceso a la vivienda en este país. Unos factores que se suman a la estafa del ‘alquiler fantasma’ que ha surgido en los últimos meses.

Ahora la compañía comparadora de seguros de impago de alquiler Arrenta ha informado que, en la pasada primavera, recibió una amplia variedad de consultas de clientes que habían proporcionado sus datos personales, e incluso el recibo de su última nómina a un número de teléfono y a un correo electrónico. Un proceso realizado con el objetivo de comprobar si sus datos eran los adecuados para contratar el seguro de alquiler de la vivienda.

Sin embargo, ninguno de los contactos a los que se remitieron los datos de los clientes correspondía con el correo o teléfono de la propia empresa, de modo que una o varias personas suplantaron su identidad para hacerse con los datos personales y económicos de los usuarios. De este modo, se produjeron los casos de ‘alquiler fantasma’, es decir, de viviendas que aparecen anunciadas en diferentes webs pero no están en el mercado. Asimismo, estos portales fueron las ‘trampas’ en las que cayeron los clientes interesados.

“A través de una web de anuncios de alquiler, encontramos un piso a un precio que de media era un 25% menor que los pisos de similares características. Lo alquilaba un particular, que insistía en que no alquilaría a través de una agencia”, contó Cristina, una de las afectadas por esta estafa, y que relató cómo se dieron cuenta del engaño. “De repente el anuncio del alquiler desapareció de la web. En Arrenta, nos comentaron que no se había tramitado ninguna petición con nuestros datos”.

Sin embargo, no fue la única afectada. En verano también se disparó el número de casos de afectados por una estafa con el mismo procedimiento de sustracción de datos personales y bancarios. Otro caso destacado fue el de Pablo. El afectado denunció que los datos que facilitó a una tercera persona que alquilaba un piso, fueron utilizados de este modo. “Meses después me enteré que mis datos se utilizaron para comprar electrodomésticos, para los que había buscado financiación a través de Cofidis”.

Sentimiento de “indefensión”

Ante estas situaciones, los clientes dijeron sentirse “desprotegidos e indefensos” y aseguraron que deberían ponerse en marcha una serie de herramientas para perseguir este tipo de delitos. “Pensamos que debería haber herramientas que ayuden al damnificado”, sentenció otra de las damnificadas por la estafa.

Tanto desde la Policía Nacional, como desde la comparadora de seguros, advirtieron de la aparición de grupos organizados dedicados a este tipo de estafas, y mencionan la necesidad de no caer en la trampa para evitar que los delincuentes utilicen los datos de las víctimas para realizar actividades fraudulentas, como lavado de dinero o alquileres con sus nombres con pólizas de impago de alquiler.