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EL PERFIL

Bellerín: el buen extremo que ya es el lateral perfecto

Elegido como le mejor lateral derecho de la Premier, en 2011, Wenger lo reclutó como 'gunner' tras ocho años en La Masía. El Barça le pretende.

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Bellerín: el buen extremo que ya es el lateral perfecto

A Héctor Bellerín (19-3-1995) se le está quedando un final de temporada perfecto. Asentado en los planes de Arsene Wenger este curso recientemente finalizado, ahora es objeto de deseo del Barça para la próxima temporada y sabe que su escaparate en el mercado será mucho más atractivo una vez haya jugado la Eurocopa. Humilde de carácter, pero con el gen ganador, el lateral se hizo mayor en Londres, pese a tener, como muchos otros futbolistas que acabaron en las inferiores del Arsenal, un indiscutible ADN de La Masía.

Bellerín disputó esta temporada 3240 minutos en Premier League con el Arsenal (32 partidos). Cumplió de sobras y eso llamó la atención de Del Bosque, que sabe que en él está el lateral del futuro. Rápido y constante, el defensa es contundente y hábil con el balón en los pies.

En La Masía estuvo desde 2003 hasta 2011, año en el que Francis Cagigao y Wenger lo reclutaron como Gunner. Junto a él se fue Jon Toral, aunque la suerte de éste no fue del todo la esperada: se rompió la rodilla y le restó protagonismo, siendo Bellerín la joya de aquella hornada. En aquel tramo de la generación de 1995 estaban futbolistas como Dongou (ahora en el Zaragoza), Grimaldo (no juega en el Benfica), Bagnack (fue despedido del Barça), Sandro, delantero del primer equipo que no seguirá en el equipo de Luis Enrique o Sergi Samper, que se recupera de una lesión a la espera de saber qué pasará con él la próxima temporada.

Pero a lo que íbamos. Consciente de su potencial, Bellerín tuvo que refrescar ideas y adpatarse al lateral, cuando siendo Benjamín, Infantil y Cadete, desbordaba con mucha clase a los laterales rivales: era un extremo de calidad. Eso sí, García Pimienta, su entrenador (y el de tantos cracks que hablan maravillas del técnico, exjugador del Barça y de otros equipos en la década de los 90), le advirtió que su futuro estaba en el lateral, y no erró.