Sánchez y Vargas brillan en Lima y Chile es líder de la clasificatoria

El campeón de América cumplió con su nueva condición. Sumó seis puntos en los dos primeros partidos y quedó al tope de la clasificatoria sudamericana para Rusia 2018 tras vencer categóricamente a Perú, por 4-3, la noche del martes en Lima.

Los de Sampaoli coronaron una jornada perfecta gracias a la inspiración de Alexis Sánchez y Eduardo Vargas quienes, entre otras cosas, lograron eclipsar la marca conjunta de los ya legendarios Iván Zamorano y Marcelo Salas.

El primer tiempo tuvo todos los ingredientes que se le pueden pedir a un encuentro para convertirlo en un partidazo.

A los siete minutos, Mauricio Isla tiró un pase al vacío. Eduardo Vargas y Alexis Sánchez parecían velocistas de 100 metros planos y le ganaron el sprint a la defensa peruana. El Niño Maravilla anticipó al portero Gallese y abrió el marcador.

La Roja de Sampaoli era dominadora. Al cuarto de hora se lo perdía Edú Vargas tras notable cesión de Arturo Vidal. Tres minutos después le anularon un gol al renquino por posición de adelanto y a los 21', Edú casi le dobla las manos al portero local.

A los 22' se produjo un dejavú de la semifinal de la Copa América. Esta vez no fue Carlos Zambrano el protagonista de una torpeza, si no que Christian Cueva, quien le dio un pelotazo en la cara a Jorge Valdivia y lo mandaron a las duchas. El técnico Ricardo Gareca se agarraba la cabeza y profería insultos al viento. Es el tercer partido consecutivo en que los del Rímac quedan con un jugador menos ante Chile.

Cuando el segundo gol de la Roja era inminente, Jefferson Farfán arrancó en posición de adelanto y definió con fuerza ante un Claudio Bravo que descuidó el primer palo.

A los 33' parecía que el milagro peruano era posible. El juez argentino Néstor Pitana sancionó penal de Mark González a Zambrano. En el impulso por saltar, Chico Mark le dio un rodillazo al defensor peruano. Farfán le pegó fuerte y el Nacional limeño se vino abajo.

Chile retomó la tarea, esta vez desde atrás. En una jugada de baby fútbol, esas que son de toques sucesivos para que un delantero defina solo frente al arco y sin portero, fue Vargas quien debió empujarla tras una brillante combinación de Sánchez y Valdivia.

Perú, que ya estaba con 10 jugadores, lamentó la lesión de André Carrillo. Y cuando estaban con nueve, al filo del descanso, Alexis Sánchez clavó la estocada del desnivel, tras otra brillante combinación en serie de Isla y Díaz.

Si haberse ido al descanso con ventaja tras remontar un marcador adverso ya era una inyección anímica para los de Sampaoli, el gol a los tres minutos de reanudado el partido de Vargas, tras veloz carrerón de Sánchez, fue un multivitamínico directo a la vena. Y casi la extremaución para los dueños de casa.

La Roja bajó el pie del acelerador, silenció al coloso limeño e, incluso, hizo que algunos seguidores locales abandonaran el recinto a los cinco minutos del segundo tiempo. En los descuentos, un puntazo de Paolo Guerrero aportó al honor de los locales.

El equipo de Sampaoli cumplió con sus pergaminos, es líder de la clasificatoria mundialista y por primera vez gana sus dos primeros partidos camino a una Copa del Mundo. Por momentos, la Roja dio un baile en Lima, en un estadio donde no ganaba hace 30 años.

Era casi como un sueño del que, por cierto, ningún chileno quiere despertar.