BUNDESLIGA
El martillo pilón del Bayern vuelve a ser el gran favorito
Arranca hoy la Bundesliga con un favorito por encima de todos: el Bayern. La llegada de Lewandowski le da más potencial, además de restárselo al Dortmund.
Stuttgart y Werder Bremen ganaron las dos primeras Bundesligas tras la reunificación alemana en 1991. Desde entonces el martillo pilón del Bayern ha ganado 12 de las 21 restantes. Varios técnicos, distintas generaciones, siempre el Bayern. Sólo las cinco del Dortmund en dos etapas le hicieron frente, pero la forma de apabullar en las dos últimas deja poco margen a la sorpresa.
Con Lewandoski ya en el Bayern la pregunta no es si los de Guardiola serán campeones, sino cómo. Cuánta ventaja, qué variantes tácticas veremos, qué inventará. Esa es la principal razón para disfrutar de la liga de los campeones del mundo. De momento la llegada de Bernat hace que Guardiola pruebe a Alaba de central, con defensa de cuatro en algún amistoso y de tres en la Supercopa perdida con un carro de bajas ante el Dortmund. Bien perdida, en cualquier caso. La aparición de Gaudino en la Supercopa, otra arma más con la que cuenta Guardiola. Gaudino y Julian Green, dos de los jóvenes que veremos de esta cantera del Bayern inagotable. Se marchó Mandzukic y sigue Pizarro como el suplente modelo. Que Ribéry haya renunciado a la selección y que Robben viva una segunda juventud le da al Bayern más margen todavía.
Difícil para Klopp y su magnífica obra en el Dortmund. Primero Götze, luego Lewandowski, ya asoma Reus y los que se irán. Produce diamantes que acaban en el escaparate del Bayern. Pero mientras ha logrado títulos, y también ha sabido cambiar el estilo de juego. Con Reus en el equipo aún aspira a competir con el Bayern. Sin él sería imposible. Asoman Jojic y Ginter, al que si cuidan acabará siendo jugador de la selección absoluta, y la llegada de Immobile mejora más aun el concepto que mejor maneja Klopp, salidas rápidas con espacios. Esa es la principal arma de un equipo que seguirá atacando mucho por los laterales.
El resto, tratar de no alejarse mucho del Dortmund y mirar al Bayern con catalejo. Ilusiona la llegada al Leverkusen del turco Calhanoglu, un mediapunta fabuloso que fue lo más rescatable del pésimo Hamburgo de la temporada pasada. Jamás descendió el Hamburgo, que se salvó en la promoción con Slomka. Su agonía es otra de las atracciones del torneo. Sidney Sam en un Schalke que debería mantener la tercera plaza y un ojo puesto en el RB Leipzig, que amenaza con convertirse pronto en animador de primera. Pero para eso queda mucho dominio aún del Bayern.