Kobe Bryant hará lo que esté en su mano para llevar a Los Ángeles Lakers a los playoffs y una nueva prueba de ello fue su eléctrica actuación frente a Atlanta Hawks (99-98) con canastas decisivas en un tramo final de infarto que colocan a su equipo con 30 victorias y 30 derrotas, un balance equilibrado por primera vez desde el 28 de diciembre.

Bryant firmó 34 puntos -incluido un mate a falta de 2:17 que dará la vuelta al mundo-, 6 rebotes y 4 asistencias, mientras que Dwight Howard aportó 11 tantos y 15 rebotes. Steve Nash añadió 15 puntos y 10 asistencias. Por parte de Atlanta destacaron el pívot dominicano Al Horford, con 24 puntos, y Josh Smith, con 19 tantos, 7 rebotes y 7 asistencias.

Los angelinos, que cometieron 21 pérdidas de balón, no pierden en casa frente a los Hawks desde febrero de 2006.

Tras un comienzo titubeante por parte de ambos equipos, los angelinos se desataron (23-12) guiados con firmeza por Nash, que hacía circular el balón a las mil maravillas y generaba tiros sencillos para Bryant y Howard especialmente, aunque el poderío del dominicano Al Horford en la zona llevó a Atlanta a un parcial de 0-8 para recortar la renta (28-26) poco antes del término del primer cuarto.

En la "noche latina" -se podía leer "Los Lakers" en las camisetas locales-, se imponían los ataques con claridad. Los californianos anotaban el 68,4 por ciento de sus tiros (13/19), pero los Hawks no se quedaban atrás con un 57,9 por ciento (11/19).

El equipo de Larry Drew mantenía sus buenas sensaciones y un parcial acumulado de 5-23 cimentado en la labor de Josh Smith le daba un pequeño colchón al ecuador del segundo periodo (30-37), si bien las cosas no tardaron en volver a igualarse gracias a la aparición del reserva Antawn Jamison, muy acertado desde el perímetro, que dejó las cosas en 52-45 al descanso.

Bryant entró con ganas en la segunda mitad y no sólo devolvió los diez de ventaja a los californianos, sino que contagió a sus compañeros y tanto Nash, jugando como en los viejos tiempos, como Clark, básico como sustituto del lesionado Pau Gasol, ayudaron a decantar el choque (65-49).

Los hombres de Mike D'Antoni, a pesar de ello, no podían competir con la velocidad de su contrincante y Atlanta regresó al partido (76-73) a base de contraataques y acierto desde el exterior, en especial por parte de Devin Harris con tres, aunque Bryant espoleó al Staples Center con un triple sobre la bocina para concluir el cuarto.

Los Hawks, agresivos en defensa, continuaron apretando gracias a un inspirado Kyle Korver (83-84) y obligaron a su rival a luchar por la victoria hasta el último suspiro. Los últimos seis minutos se disputaron entre ventajas mínimas para cada equipo pero un estratosférico mate de Bryant dejaba claro que la estrella local no iba a dejar escapar el encuentro.

Tras una penetración de Jeff Teague, Bryant anotó dos tiros libres clave (97-96) a falta de 33,5 segundos. A continuación Horford aprovechó un flagrante despiste defensivo de Howard (97-98) y Bryant apareció de nuevo para decidir con una poderosa entrada a canasta (99-98). En la jugada final, Josh Smith perdió el balón y el público explotó de júbilo.