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Dos jugadores de NFL llevaron apoyo a niños inmigrantes

Josh Norman (Redskins) y Demario Davis (Saints) participaron en las labores para ayudar a aquellas familias que fueron separadas al cruzar la frontera.

Dos jugadores de NFL llevaron apoyo a niños inmigrantes
Fernando Franco
Estados Unidos Actualizado a

Ante la controversial situación que vive su país, Josh Norman y Demario Davis no podían quedarse con los brazos cruzados. Algunos dirán que es una "bofetada con guante blanco" al gobierno, pero lo indiscutible es que su actuar con los inmigrantes es una auténtica lección de que, más allá de ser jugadores de la NFL, son seres humanos.

Recientemente, Donald Trump, presidente de Estados Unidos, decidió aplicar una política de "cero tolerancia" en la frontera con México. Esto indica que, ante cualquier invasión ilegal a su territorio, la policía actuará y encarcelará a los sujetos en cuestión. Familias destruidas, niños llorando y brutalidad por parte de las autoridades han sido imágenes constantes en el borde que separa a ambas naciones.

La madrugada del 20 de junio fue diferente para Josh Norman. El esquinero de los Redskins no podía consciliar el sueño y a las 2 a.m. decidió prender el televisor. Al hacerlo, sintonizó las noticias y se dio cuenta de lo que estaba sucediendo: más de 2,000 niños habían sido separados de sus padres por la patrulla fronteriza bajo las órdenes del mandatario. El defensivo actuó inmediatamente y llamó a Demario Davis para ir a apoyar a los inmigrantes.

Los jugadores de Redskins y Saints hicieron sus maletas y viajaron a San Antonio para asistir a los albergues de los niños y otorgarles su ayuda. A casi una semana de enterarse del suceso, Norman y Davis llegaron directamente al supermercado para comprar víveres. Comida, agua, jugo, cobijas, libros para colorear, crayones, juguetes, pelotas y mochilas fueron parte de los seis carros que llenaron para entregar en las casas temporales de los afectados.

"Ponte en los zapatos de los demás", dijo Norman para USA Today Sports. "Ellos tienen nada, vienen aquí a pedir asilo, no saben a dónde van, sólo que viajan a un lugar mejor del que estaban. Después llegan aquí y los tratan peor que a un perro. Hemos perdido nuestro tacto como humanidad. Esto es por los niños. Nunca pensé dos veces cuando el Señor me dijo 've'".

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Norman y Davis tomaron a un grupo de alrededor de 30 niños y a sus madres a un restaurante del otro lado de la calle. Cuando se enteraron de que otro autobús lleno de inmigrantes llegaría, los dos dejaron la comida para regresar al supermercado y comprar otros seis carros llenos de víveres, en los cuales gastaron cerca de $10 mil dólares. "Nunca fue cuestión de dinero, solamente hicimos lo que teníamos que hacer", sentenció el ahora linebacker de los Saints.

El equinero de los Redskins es un aficionado a los superhéroes, pero ahora él fue quien se colocó la capa para ayudar a decenas de niños que solamente buscan, junto con sus familias, un mejor futuro. "Tratemos de cambiar vidas. Demostremos un poco de amor", expresó Josh Norman.

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