Favorazo de Volkanovski a Topuria
El retorno del australiano a lo más alto del peso pluma añade mérito a nivel mundial a lo logrado por Ilia Topuria. Al igual que lo ocurrido en su día con Whittaker o Holloway, esta victoria demuestra que, más allá de excusas, el factor clave es la diferencia de nivel entre peleadores.
“Lo noqueó porque ya está muy mayor... viene de perder con Makhachev, ya no es el mismo...”, eran algunas de las justificaciones populares para la derrota que sufrió Volkanovski ante Ilia Topuria en febrero del pasado año. El papel de villano que había asumido el hispanogeorgiano para aquella pelea acrecentó el sentimiento de que no había ganado a un campeón legítimo, pues aquel ‘Volk’ de 35 años de edad venía de haber sido brutalmente finalizado por Islam Makhachev hacía tan solo 4 meses.
Sin embargo, el de Wollongong, todo corazón y resiliencia, regresó a lo más alto de la categoría del peso pluma este pasado sábado tras más de un año trabajando para olvidar aquellas dos derrotas. Con toda justicia y merecimiento, Volkanovski venció a Diego Lopes. Para el pesar de muchos detractores de Ilia, el australiano volvió a ser campeón, con 36 años y sin que aquellas dos derrotas se hayan borrado por arte de magia, lo que demuestra que, más allá de la edad, el récord o los factores, lo que pesa realmente en un deporte como las MMA es, por encima de todo, el nivel de pelea.
Es por todo esto que, esta victoria de ‘The Great’ en UFC 314 no solo le sirve a él mismo para erigirse como el mejor de la historia de las 145 libras, sino también para darle un valor real a lo conseguido por Ilia en su ascenso en la categoría, primero quitándole el invicto en peso pluma a ‘Volk’, para después convertirse en el primer peleador en noquear a Max Holloway. Ni McGregor, ni Poirier ni el propio Volkanovski lo consiguieron hacer en su día.
El habitual ‘caso Whittaker’
Pese a que cada categoría posee nombres, características y desarrollos muy diferentes, existen en todas ellas ciertas figuras muy reconocibles. Casos como el de Robert Whittaker Jr. o el del propio Max Holloway anticipan lo que posiblemente hubiera vivido Volkanovski en caso de que Ilia Topuria jamás hubiera dejado vacante su cinturón para dar el salto al ligero.
Whittaker en peso medio y Holloway en peso pluma se convirtieron en auténticas escobas de sendas categorías. Ambos limpiaron el ranking de contendientes en ascenso a base de exhibiciones. Sin embargo, ambos vivieron a la sombra de sólidos campeones que simplemente demostraron ser mejores (Adesanya y el propio Volkanovski, respectivamente). Es por eso que, fuera de todas las excusas de la edad y el desgaste, una victoria sobre un emergente Diego Lopes demuestra que Volkanovski no estaba realmente acabado, simplemente tuvo la mala suerte de interponerse en el camino de Ilia Topuria.
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