Lautaro Martínez. Nicolò Barella. Yan Sommer. El Inter de Milán aterrizó en Seattle con toda su artillería y, ni así, logró convocar a más de 26,000 aficionados en el Lumen Field. A la costa noroeste de Estados Unidos llegó todo un subcampeón de Europa, una de las máximas potencias futbolísticas del planeta... y no fue suficiente para que las gradas del recinto donde juegan los Seattle Sounders y los Seattle Seahawks lucieran esplendorosas el sábado al mediodía.

Una postal que se ha repetido en el Mundial de Clubes 2025. Tribunas enteras vacías en la mayoría de los partidos del certamen. La fotografía se repitió este sábado durante el duelo entre Inter de Milán y Urawa Red Diamonds, pese al cartel del gigante italiano. La sección superior del Lumen Field ni siquiera fue abierta al público. Aún así, las gradas laterales también lucieron pocos huecos y la legendaria tribuna triangular al Lumen Field apenas pintó a un puñado de aficionados. La asistencia no fue tan baja como en otros encuentros del Mundial de Clubes, pero distó de ser óptima.

Las asistencias a los partidos del Mundial de Clubes ha causado amplio debate. Algunos cotejos han reunido a menos del 20% del aforo, como el Inter&Co Stadium de Orlando, cuyo registro de 3,412 fans que acudieron al Mamelodi Sundowns vs. Ulsan Hyundai se mantiene como el más bajo del torneo. La FIFA sostiene que ya ha vendido más de 1.5 millones de entradas para el campeonato, sin indicar las que se han quedado en las taquillas: la estimación de la BBC apunta a que, hasta el jueves 19 de junio, 423,004 asientos quedaron vacíos. La cifra oficial de espectadores en el Lumen Field para el enfrentamiento entre Inter y Urawa fue de 25.090, lo que significa el 36.4% del coliseo. 25,000 menos de las que hubo en el mismo edificio el pasado jueves durante el Seattle-Atlético de Madrid.

Clima frío en Seattle

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Las condiciones climáticas tampoco ayudaron. Seattle amaneció este sábado bajo una fina y pertinaz lluvia fría que hizo descender el termómetro hasta los 11°C. Típico clima de la costa noroeste. Un partido en contexto netamente Seattle. El ambiente de las calles se extendió a las butacas del Lumen Field. El color y el ruido corrió por cuenta, otra vez, de la nutrida barra del Urawa Red Diamonds, tal como ocurrió el pasado martes, frente a River Plate: aproximadamente 3,500 hinchas nipones que no cesaron de alentar, agitar sus banderas, y saltar durante los 90 minutos. Un pequeño trozo de Saitama en Seattle.

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