Davidovich cae con un saque por abajo: “Estaba cagao”

Después de la clasificación de Carlos Alcaraz para octavos de Wimbledon, con su victoria contra el chileno Nicolás Jarry, Alejandro Davidovich estuvo muy cerca de completar la fiesta española con un triunfo contra Holger Rune, sexto favorito, que hubiera tenido mucho mérito y le habría dado prestigio.

El malagueño, que venció al danés de 20 años hace dos meses en el Mutua Madrid Open, en un encuentro que fue tenso y polémico, le tuvo contra las cuerdas, con 5-4 a su favor y dos puntos de partido al resto, pero desperdició esas ocasiones y más tarde, una decisión difícil de comprender le apartó de triunfo. Con 8-8 en el marcador del superdesempate del quinto set, el malagueño hizo un saque por abajo, su rival lo vio, corrió a por la bola y ganó el punto. Después, tenía el servicio para cerrar una victoria que se le había complicado muchísimo y no lo desperdició. Davidovich tiró una derecha a la red y fin de la historia: 3-6, 6-4, 6-3, 4-6 y 7-6 (8) en casi cuatro horas de emocionante y de nuevo nervioso duelo. Rune se enfrentará el lunes al estadounidense Frances Tiafoe o al búlgaro Grigor Dimitrov.

Fue un final cruel para Alejandro, un tenista magnífico al que en ocasiones le pierde su dificultad para gestionar la presión. Dicho esto con el respeto que se debe a quien, con las pulsaciones al máximo, se juega pasar a la segunda semana de un Grand Slam. Así se le escapó una gran oportunidad en ese tie-break a diez tantos en el que tuvo ventajas jugosas: 4-1, 6-2, 8-5… Su actuación había sido maravillosa y quedó empañada por ese detalle extraño que no acertó a explicar demasiado bien. Lo hizo de una forma muy gráfica y sincera, lo que le honra: “Lo voy a decir en término andaluz, estaba cagao. No había hecho ningún saque por abajo en todo el partido y a lo mejor creía que le sorprendía. Y no ha sido así. No quería jugar el punto, estaba temblando y es una experiencia más que me llevo. No sé qué hubiese pasado si hubiera jugado valiente, la próxima vez será”.

Serenidad y aceptación

Davidovich, muy sereno para lo que le acaba de pasar, dijo que no cree que ese servicio fuera tan decisivo: “Si la gente es un poco inteligente, sabrá que por ese tiro no voy a perder el partido. Tuve dos match points, en uno él subió a la red, después me hizo un buen saque y tenía el partido ahí. Los puntos son muy largos y hay que seguir jugando. A lo mejor meto en la derecha en el 9-8, subo la red y le gano, 9.9 y vete a saber qué pasa...”. El andaluz está resignado ante lo sucedido y mira hacia adelante: “Cuando estás cagado, lo tienes que aceptar, porque si no te mientes a ti mismo. Yo lo reconozco, se lo he dicho a mi equipo cuando los he visto, que estaba muy tenso en el 8-8 y me ha salido lo primero que me ha venido y ya está. Él ha sido más valiente. Ahora, a por el dobles”. Jugará este domingo con el francés Adrian Mannarino, contra los indios Bhambri y Myneni.