Kalinina, finalista con ranking más bajo en 38 años

Anhelina Kalinina obtuvo este viernes en Roma el mejor resultado de su carrera al convertirse en la segunda ucraniana que alcanza la final de un WTA 1.000. Lo consiguió con otra trabajada victoria en uno de esos partidos tristemente tensos que se ven desde hace tiempo en el circuito por motivos políticos, contra la rusa Veronika Kudermetova (6-2, 5-7 y 6-2 en 2h15). No hubo saludo al final, como es habitual, entre ambas jugadoras y Kalinina, la tenista con ranking más bajo (47ª) que alcanza el duelo por el título de este torneo desde 1985, se enfrentará el sábado (19:00, Teledeporte) a Elena Rybakina, que controló el ímpetu de la letona Jelena Ostapenko (6-2 y 6-4 en 93 minutos) en un encuentro que estuvo parado por culpa de la lluvia. La kazaja, líder del año en saques directos con 276, despachó siete en esta ocasión. Es la tercera jugadora en la Era Open (desde 1968) que llega a las finales del Open de Australia, Indian Wells, Miami y Roma tras Monica Seles (1991) y Maria Sharapova (2012). Kalinina tiene el balance a favor (1-0) en el cara a cara.

Mucho mérito el de Kalinina, que tuvo que pasar tres horas y 41 minutos en la pista para ganar el martes en cuartos a la brasileña Beatriz Haddad Maia. Nacida en Nova Kakhovka hace 26 años, Anhelina no tiene equipaciones patrocinadas, y, como hasta hace poco la española Cristina Bucsa, juega con ropa de diferentes marcas. El choque ante Kudermetova lo empezó con una camiseta Asics, un pantalón ON y gorra Nike, y acabó con una camiseta de la firma estadounidense y una cinta Yonex, como sus zapatillas.

Esa guisa no le resta capacidad y en esta ocasión fue superior estratégicamente, para aguantar los ataques de una rival (41 golpes ganadores) a la que superó por dos puntos (102-100). Era su primera semifinal en un evento de esta categoría y ahora es virtualmente la 25ª de la clasificación, el mejor puesto de su carrera.

Esperanzas y desencuentros

“Lo primero es que necesito recuperarme antes de mañana, el torneo todavía no ha terminado. Me espera una batalla, las dos son jugadoras top. Nunca es fácil en estos torneos, pero esta es una sensación increíble, el poder competir a este nivel es nuevo para mí. Estoy muy feliz por ello”, dijo Kalinina, que acabó con una alegato a favor de Ucrania: “Para mí, es muy importante ganar cada partido por lo que está pasando en Ucrania. Espero que pueda dar un poco de luz, quizás algo de emociones positivas para mi país. Así que espero que Ucrania lo disfrute”. Kudermetova se zafó con astucia de la pregunta de un periodista sobre su relación con su oponente: “Estamos aquí y amamos lo que hacemos. No importa de qué país seas. Somos deportistas y eso es todo. Estamos aquí para jugar al tenis”.