Alcaraz se hace enorme en Indian Wells

Todo el mundo sabía que Carlos Alcaraz tenía trazas de grandísimo jugador, lo demostró como campeón del US Open, número uno y ganador en Wimbledon. Y este sábado en Indian Wells dio un paso enorme para consolidar esa sensación. Con 20 años y contra un Jannik Sinner que, como dijo hace unos días Tommy Paul, estaba “jugando desnudo”, en racha de 19 victorias desde las Finals de la Copa Davis de 2023 (16-0 este curso con títulos en el Open de Australia y Róterdam), el español ajustó de manera genial su tenis en pleno partido. Así remontó después de encajar una paliza en el primer set para ganar con una grandeza tremenda por 1-6, 6-3 y 6-2 en las dos horas que duró un encuentro que estuvo parado más de tres por culpa de la lluvia.

Alcaraz vuelve a una gran final, la primera desde la de otro Masters 1.000, el de Cincinnati, el curso pasado (la épica que perdió contra Novak Djokovic). Este domingo (22:00, Movistar+) defenderá su título en el torneo contra el ruso Daniil Medvedev, que remontó también ante el estadounidense Tommy Paul (1-6, 7-6 (3) y 6-2 en 2h24). Será la reedición de la pasada con el cara a cara a favor del español (3-2). El éxito de alcanzar el último partido en esta categoría de eventos por sexta, con lo que iguala a su entrenador, Juan Carlos Ferrero, y a Carlos Moyá en el tercer puesto de la lista histórica española, por detrás de Rafa Nadal (53) y de David Ferrer (7), le reporta, además, conservar el número dos. Se lo hubiera quitado Sinner con una victoria. De esta manera, y ante la ausencia del líder del ranking, Djokovic, en Miami partirá la semana que viene como cabeza de serie número uno.

Pero Carlitos tiene una relación muy especial con el desierto de California, donde le ha ido muy bien. Allí acumula 11 triunfos consecutivos. Fue semifinalista en 2022 y campeón en 2023, después de derribar en el Stadium 1 al propio Sinner, de quien se desquita ahora tras dos derrotas consecutivas, la temporada pasada en Miami y Pekín, para igualar el cara a cara (4-4). Ahora aspira a ser el primero que revalida el título en el BNP Paribas Open desde Roger Federer en 2018.

El plan B de Alcaraz

¿Y qué es lo hizo Alcaraz para reaccionar? Pasar del juego directo, a palos, del primer set interruptus, a un tenis más de tierra batida, de bolas altas, con peso y revoluciones, más lento, restando desde muy atrás para hacer que Sinner tuviera que pensar y no poder golpear de carrerilla, con ese instinto matador que le había hecho invencible. La táctica de Jannik estaba clara: sacar a Charly del centro de la pista. ¿Cómo? Cruzando todas las bolas. Y así lo hizo de manera magistral durante casi una hora, hasta el cuarto juego del segundo parcial. A partir de ahí, todo se le torció por el práctico desempeño de su rival.

Aun en pleno ascenso de Charly, Sinner se sacó de la manga el mejor punto del partido y uno de los mejores del año, con una contradejada final espectacular. Aunque, por aquel entonces, ya había perdido el mando de las operaciones. Quien dictaba era Alcaraz.

Y en la tercera manga, otro punto de inflexión, con una volea felina que dejó literalmente al transalpino revolcándose por el suelo. Se hizo algo de pupa en la muñeca derecha, pero la herida de verdad la tenía en la mente. Se la había destrozado el murciano con su tenis de escuela española, a lo Nadal. De hecho, el estilo de las derechas de Carlitos se parecía al que hizo convirtió en un gigante al balear. No siempre el camino más recto lleva antes a la meta. Eso lo aprendió Alcaraz, ante quien él mismo calificó el jueves como “el mejor del mundo ahora mismo”. La pregunta es, ¿en qué lugar deja entonces esta victoria al prodigio de El Palmar?

Sigue el canal de Diario AS en WhatsApp, donde encontrarás todo el deporte en un solo espacio: la actualidad del día, la agenda con la última hora de los eventos deportivos más importantes, las imágenes más destacadas, la opinión de las mejores firmas de AS, reportajes, vídeos, y algo de humor de vez en cuando.